Un grupo de militares venezolanos del llamado Fuerte Paramacay en el estado Carabobo (centro-norte del país) se sublevó este domingo, reporta EFE.
Según la información ofrecida por el dirigente chavista Diosdado Cabello, el grupo habría sido reducido por otra facción del Ejército.
"En la madrugada atacantes terroristas entraron al Fuerte Paramacay en Valencia, atentando contra nuestra FANB (Fuerza Armada Nacional Bolivariana). Varios terroristas detenidos", escribió Cabello en su cuenta de Twitter.
En la madrugada atacantes terroristas entraron al Fuerte Paramacay en Valencia, atentando contra nuestra FANB. Varios terroristas detenidos.
— Diosdado Cabello R (@dcabellor) 6 de agosto de 2017
Un video de un grupo de unos 20 uniformados portando armas largas circuló por las redes desde horas tempranas del domingo.
En las imágenes, un hombre se presentó como el "capitán Juan Caguaripano" y "comandante de la operación David Carabobo".
Caguaripano en un breve mensaje de menos de tres minutos llamó a luchar contra "la tiranía asesina de Nicolás Maduro" y sostuvo que la iniciativa del grupo no se trataba de un "golpe de Estado", según reportes de Reuters.
"Exigimos la conformación inmediata de un Gobierno de transición y elecciones generales libres", reclamaron los militares en el vídeo.
"Nos declaramos en legítima rebeldía, unidos hoy más que nunca, con el bravo pueblo de Venezuela, para desconocer la tiranía asesina de Nicolás Maduro. Aclaramos que esto no es un golpe de Estado. Esta es una acción cívica y militar para restablecer el orden constitucional. Pero más aún, para salvar al país de la destrucción total, para detener los asesinatos de nuestros jóvenes y familiares", agregó Caguaripano.
Los militares pidieron, además, a toda Venezuela y a todos los militares que se sumaran a la rebeldía contra la Constituyente de Maduro.
El grupo se declaró en rebeldía "para restablecer el orden constitucional", pero el Gobierno dijo que se trató de un "ataque terrorista" y la situación fue controlada por las Fuerzas Armadas.
"Nuestra FANB actuando con máxima moral en defensa de su Honor, de la Paz, y de la Patria ha controlado la situación", agregó Cabello minutos después en su cuenta de Twitter, asegurando que había "absoluta normalidad" en el resto de las unidades militares del país.
Consolidado totalmente el control en el Fuerte Paramacay luego del ataque de grupos terroristas mercenarios. Pronto detalles de lo sucedido
— Diosdado Cabello R (@dcabellor) 6 de agosto de 2017
Un testigo confirmó a Reuters que cerca del lugar de los hechos (el Fuerte Paramacay) se escucharon disparos. Otros vídeos difundidos en internet mostraron movimientos de blindados y unas decenas de civiles cerca cantando el himno nacional en apoyo.
#AHORA 8:13am Vecinos de la 41 Brigada Blindada, en los alrededores el fuerte #6Ago @DanyCosmoVZLA pic.twitter.com/g4B2FelmP1
— Elyangelica Gonzalez (@ElyangelicaNews) 6 de agosto de 2017
Minutos después, Remigio Ceballos, comandante estratégico operacional de las FANB, escribió en su Twitter que siete de estos militares (a los que calificó de "terroristas") habían sido detenidos.
Nuestra FANB repelió con éxito ataque terrorista delictivo paramilitar, los 7 capturados están aportando datos !!!
— A/J REMIGIO CEBALLOS (@CeballosIchaso) 6 de agosto de 2017
De acuerdo con el diario español El País, "no es la primera vez que el capitán Caguaripano aparece vinculado a un acto de rebeldía".
"El Tribunal Militar 3° de Control de Caracas había emitido una orden para detenerlo en 2014 por su presunta participación en un plan para derrocar al presidente Nicolás Maduro. Por ese plan, llamado el Golpe Azul, fueron enjuiciados tres generales de la Fuerza Aérea Bolivariana", agrega el periódico español.
El episodio de esta madrugada del domingo se produjo horas después de que una criticada Asamblea Nacional Constituyente sesionara por primera vez, asumiendo poderes especiales sobre el resto de las instituciones del Estado.
El cuerpo encargado de redactar una nueva Constitución destituyó en su primer día de labores a la fiscal general Luisa Ortega, quien rompió con el Gobierno de Nicolás Maduro, en medio de la ola de protestas antigubernamentales que lleva más de cuatro meses y ha dejado más de 120 personas fallecidas.
Decenas de países del mundo han criticado la Asamblea Constituyente promovida por Maduro, además de la oposición, que asegura que con ese mecanismo el presidente busca aferrarse al poder.