El Gobierno cubano estima lograr una producción de más de 50.000 toneladas de níquel y cobalto al cierre del presente año, según publicó la edición digital del periódico oficial Ahora.
Eder Manuel Oliveros Garcel, director del estatal Grupo Empresarial Cubaníquel, dijo que la industria del mineral, una de las principales fuentes de ingresos de La Habana, "se enfrenta al reto de la eficiencia".
Las empresas Moa Nickel S.A. Pedro Soto Alba y Comandante Ernesto Che Guevara, que ubican a la Isla entre los diez primeros productores de níquel, requieren constantes inversiones para modernizarlas, como única manera de mantenerlas en explotación.
En la productora de Níquel y Cobalto Che Guevara, con la entrada de nuevos equipos, se revitalizan las operaciones de extracción del mineral, señaló.
No obstante, otros de esos medios ya pactados, deben mejorar las operaciones como la carga en las minas.
Según Yovani Aldana Espinosa, director de dicha industria, el restablecimiento de los caminos es prioridad, pues aún se evidencian las afectaciones de las lluvias de meses atrás.
Trabajadores de la Che Guevara laboran también en la construcción de tres grandes plazoletas para el depósito de mineral, a fin de poder enfrentar posibles afectaciones con las lluvias que son abundantes en esta época del año.
Actualmente el Gobierno invierte unos 50 millones de pesos en mantenimiento a puntos vitales de la industria. Las acciones se concentran en los hornos de reducción, los sistemas de captadores de polvo, para minimizar las pérdidas de mineral y afectaciones al medio ambiente. También se labora en los sedimentadores de lixiviación.
Las cotizaciones del níquel, que se usa para la fabricación de acero, aleaciones especiales y artículos de alta demanda como baterías, teléfonos móviles, automóviles, superan hoy los 11.200 dólares por tonelada; en tanto, las del cobalto, rondan los 55.000 dólares.
Las estimaciones de ingresos por la exportación del níquel cubano —cuyo principal cliente es China, seguido de Canadá y países de Europa— se han movido en los últimos años en el entorno de los 600 millones de dólares anuales, según datos oficiales.