La Gaceta Oficial publicó nuevas regulaciones sobre la permuta, donación, compraventa y la construcción en las viviendas ubicadas en zonas que el Gobierno considera de "alta significación" para el turismo, informa la agencia IPS.
Bajo esa categoría se encuentran diversos territorios cubanos, como el balneario internacional de Varadero y el municipio capitalino de Habana del Este, que son sometidos a fuertes regulaciones. El calificativo de zonas de alta significación para el turismo es una de las 12 categorías proteccionistas pautadas por el Decreto-Ley 331, de 2015, sobre las zonas especiales.
Con las nuevas regulaciones, el delegado territorial del Ministerio del Turismo será quien autorizará cualquier tipo de trámite habitacional en esas zonas.
La resolución brinda poderes a las delegaciones territoriales de Turismo, Planificación Física y Vivienda para decidir cuáles trámites proceden y cuáles no.
Según esta nueva resolución, publicada en la Gaceta Oficial el 24 de julio, en caso de permuta, donación y compraventa de inmuebles, la ciudadanía deberá presentar solicitud de autorización a la Dirección Municipal de la Vivienda, un trámite que, en otras localidades, se logra de forma expedita ante notario.
Respecto a las acciones de rehabilitación, unificación, división, ampliación o remodelación, la solicitud de licencia se tramitará con la Dirección Municipal de Planificación Física.
En todas las situaciones, la delegación territorial del Ministerio del Turismo brindará el pronunciamiento final sobre cada caso concreto. Para la decisión se tendrá en cuenta mantener el equilibrio de la población residente en cada zona, evitar su incremento y el de nuevos propietarios.
Ello apunta a reducir la cantidad de habitantes de esas áreas y a limitar el crecimiento del sector privado, que en los últimos dos años ha supuesto una fuerte competencia para el alojamiento hotelero estatal.
El turismo es una de las principales fuentes de ingresos del Gobierno y de los militares, que controlan los negocios más rentables del sector.
Los nuevos procedimientos estipulan que la donación o compraventa no puede afectar los programas de desarrollo turístico.
Asimismo, se limitará el surgimiento de nuevas viviendas, en tanto se promueve un "ajuste con rigor" a los requerimientos establecidos por el Plan de Ordenamiento Territorial y las regulaciones urbanas para las respectivas zonas.
Para La Habana Vieja y Centro Habana, municipios capitalinos asociados a la Oficina del Historiador, existen ordenaciones específicas de carácter más restrictivo aún. Entre ellas, figuran que los cuartos y habitaciones que queden desocupados no se entregarán con fines habitacionales. Como establece el Artículo 8, se destinarán para el desarrollo turístico, la restauración y conservación del patrimonio y la satisfacción de servicios sociales.
Estos procedimientos aprobados, complementan las nuevas regulaciones para el sector de la vivienda en Cuba, decretadas en abril de 2017.
Mientras aumentan las restricciones, la vivienda sigue siendo uno de los sectores más deprimidos del país. Precios prohibitivos para el salario promedio en Cuba, bajo índice de construcción de nuevas viviendas, deterioro generalizado de las existentes, además de limitada cobertura habitacional, figuran entre los principales problemas.