En una reafirmación que la prensa estatal presenta como aclaración sobre las últimas regulaciones al sector privado, el Gobierno sostuvo que algunas de las medidas ordenadas son "temporales", otras solo son "de continuidad" y ninguna "constituye un retroceso".
En una entrevista con el noticiero del mediodía del lunes, la viceministra de Trabajo y Seguridad Social, Marta Elena Feitó, defendió que "todas las personas que tienen autorización para ejercer las diferentes actividades pueden practicarlas sin ningún tipo de problemas".
Una de las medidas que más preocupación levantó entre cuentapropistas fue la paralización de nuevas licencias para operar restaurantes privados y alquileres de habitaciones.
Al respecto, "las personas que se encontraban en trámites —unas 1.600— se le continúa el proceso para otorgársele las autorizaciones; entre tanto, la temporalidad de estas medidas estará determinada por el tiempo que dure el proceso de aprobación de las normas jurídicas que van a refrendar esas políticas", dijo.
La funcionaria afirmó que "no será un tiempo muy largo", aunque no ofreció fechas aproximadas. Demorará lo que dure "un proceso normal de trabajo para la aprobación de estas normas", insistió.
Actividades como el arrendamiento de viviendas e incluso las ofertas de restaurantes privados representan una fuerte competencia para los establecimientos del Estado, con servicios deficientes y altos precios.
El pasado 31 de julio, entre las medidas anunciadas en la Gaceta Oficial, el Gobierno también determinó que "de manera definitiva, en lo adelante no se otorgarán autorizaciones en las actividades de 'vendedor mayorista de productos agropecuarios', 'vendedor minorista de productos agropecuarios', 'carretillero o vendedor de productos agrícolas de forma ambulatoria', 'comprador vendedor de discos' y 'operador de equipos de recreación para los equipos rústicos'".
Sobre estas cinco actividades, cuyos permisos se suspenden, Feitó dijo que es una medida de continuidad y puso como ejemplo que "en el caso de los carretilleros o los operadores de equipos de fabricación rústica no (se) han autorizado desde hace más de un año".
Entre las nuevas medidas, recordó la viceministra, está la compactación de actividades que son afines y celebró que posibilitará "la reducción de los trámites que tiene que hacer la población; pues hasta este momento para ejercer varias actividades afines había que hacer una solicitud de cada una de las autorizaciones".
Habló de que se crean dos nuevas licencias como son la de bar y recreación así como la de panadero-dulcero.
La viceministra dejó claro que se "reforzará el control sobre las actividades por cuenta propia en la Isla a partir de la conformación de un equipo multidisciplinario de los gobiernos locales que realizarán una evaluación colectiva".
"Nos posibilitará la no reiteración de las inspecciones por diferentes cuerpos de inspectores al mismo lugar", dijo.
Recapituló "las nuevas facilidades de los titulares de las licencias que al ausentarse podrán nombrar a uno de sus trabajadores contratados para que asuma su responsabilidad durante ese tiempo".
"Actualmente esta posibilidad no existía y en esta situación lo que se hacía era una suspensión temporal de la actividad y con ello el cese del establecimiento. Ahora no será así y se permitirá la continuidad del trabajo en esos establecimientos", comentó.
Feitó insistió en que las nuevas medidas dictadas "no constituyen un retroceso". Se han tomado, señaló, para "consolidar el trabajo por cuenta propia que hoy es ejercido por más de medio millón de cubanos".
Esta no es la opinión de economistas cubanos como Carmelo Mesa-Lago y Omar Everleny Pérez, quienes han criticado la política económica del Gobierno cubano en reiteradas ocasiones.
Para Everleny, "Cuba es el único país en el que se persigue la riqueza y no la pobreza" y consideró que el Gobierno debe concentrarse en erradicar este último flagelo (...) antes de "perseguir a aquellas personas que han alcanzado un mayor bienestar".
En opinión del especialista "el ajuste se debe hacer hacia arriba, no hacia abajo", como lo han ratificado estas últimas regulaciones al sector privado.