Al menos dos tiendas de Miami venden uniformes escolares para enviar a Cuba, ya que encontrar la vestimenta constituye una proeza en la Isla.
"Tal y como sucede con otros artículos de uso personal, tener un pariente en Miami, puede hacer la diferencia entre mandar los hijos a la escuela con un uniforme descolorido, o que puedan estrenar uno recién comprado", informa Diario Las Américas.
Las tiendas El Dollarazo y Ñooo, qué barato cuentan con dichas prendas.
Según el diario, unas 1.200 piezas de vestir para uso escolar se venden cada año en El Dollarazo. El precio de un pantalón, por ejemplo, es de 5 dólares, mientras que una saya de niña puede costar 10 dólares y las blusas y camisas, entre 2 y 4 dólares, según la calidad del tejido.
Alan Blanco, gerente general de la tienda, dijo que los propios clientes comenzaron a solicitar los productos. Cuando vieron que creció la demanda, decidieron importar la mercancía en grandes cantidades desde China.
"El uniforme que usan los niños cubanos no se parece en nada al que se usa en Estados Unidos", precisó Blanco.
El gerente dijo que "la gente compra los uniformes para mandarlos a Cuba, [pues] allá los niños pueden tener solo un uniforme al año, por eso nos convertimos en una opción para las familias".
Si el estudiante está en un grado terminal, como noveno o duodécimo, se ve obligado a escoger entre comprar saya o pantalón nuevo, o decidir si le hace más falta una blusa o camisa.
El mercado subterráneo valora en unos 100 pesos cubanos un uniforme completo.
El bloqueo impuesto por Raúl Castro a las operaciones aduanales —paquetería y viajes— también afecta el envío de uniformes escolares desde Miami, un producto obligatorio que el régimen de La Habana es incapaz de garantizar.