"El líder histórico de la revolución cubana, Fidel Castro Ruz, recibió en la tarde del viernes 7 de junio al compañero Diosdado Cabello Rondón, presidente de la Asamblea Nacional de la República Bolivariana de Venezuela", informó Juventud Rebelde hace unos días.
"El presidente del Parlamento venezolano, junto al compañero Fidel, hizo un breve recorrido por numerosos cultivos capaces de generar altas cifras de proteínas para la producción de leche y carne", añadió el diario oficialista.
Pero es que, si la carne y la leche últimamente son productos escasos en Venezuela, en Cuba este es un mal crónico que ya se prolonga por más de medio siglo.
En Cuba la leche está racionada para los enfermos y los niños de hasta siete años de edad.
En las tiendas recaudadora de divisas, un kilogramo de leche en polvo cuesta poco más de cinco pesos convertibles (CUC) y un kilogramo de carne de res más de nueve.
Para llevar a la mesa un kilogramo de leche en polvo y un kilogramo de carne vacuna, una familia cubana deberá desembolsar poco más de 350 pesos, esto es más de tres partes del salario promedio en el país.
"Hay que borrarse de la mente eso de los siete años, llevamos 50 años diciendo que hasta los siete años. Hay que producir leche para que se la tome todo el que quiera tomarse un vaso de leche y hay tierras para producirla aquí", aseguró el jueves 26 de julio de 2007 Raúl Castro en Camagüey.
Pero al cumplirse seis años de aquellas pronunciadas y aplaudidas palabras, todavía no aparece el tan ansiado vaso de leche para los cubanos.
"El primer secretario del Comité Provincial del Partido (PCC) en Las Tunas, Ariel Santana Santiesteban, hizo un recorrido por el municipio Puerto Padre, donde no se está cumpliendo con la producción de alimentos", reportó este 9 de junio el Canal Azul (estatal).
Según la televisora de Puerto Padre, debido a la insuficiente alimentación, las vacas aquí solo promedian litro y medio de leche por cabeza. Esta es la producción de una buena cabra lechera.
El doctor Castro Ruz viene haciendo experimentos en la ganadería desde inicios de la década de los sesenta del pasado siglo, cuando dividió y subdividió cientos de miles de hectáreas de pasto para introducir en el país el sistema de pastoreo del académico francés Andrés Voisin.
Para asesorar la implantación de su sistema de pastoreo racional, el entonces primer ministro invitó a la Isla al académico francés, a quien la Universidad de La Habana otorgó el título de Doctor Honoris Causa.
En horas de la tarde del 21 de diciembre de 1964, el doctor Voisin falleció de un infarto en la residencia de protocolo número 1, en el reparto Cubanacán, donde residía.
"En 45 días yo construí sistemas de pastoreo completos, con todo, con materiales de primera calidad, pero ya están completamente destruidos", dijo a este corresponsal un competente maestro de obras que ha tenido a su cargo la construcción de hoteles, hospitales y fábricas a lo largo de toda Cuba.
"¡Mira esto, mira qué crimen!", dijo un viejo vaquero mostrando a este corresponsal un conjunto de lecherías dotadas en su momento con modernos equipos, hoy totalmente abandonadas.
"La ineficiente producción de alimentos en Cuba, un país de clima tropical, dotado de agua, pastos, métodos de cultivo y conocimientos para producir y conservar forrajes, se debe a concepciones erróneas de carácter político, y no técnicas. El día que los políticos se hagan a un lado y dejen a los productores llegar hasta donde sean capaces de ir, usted verá como en lugar de faltar los alimentos, sobran en este país", dijo un agrónomo experimentado a este corresponsal, precisando: "Para eso es necesario que dejen de experimentar con lo que sabemos hacer".
Parece poco probable que los comunistas cubanos, encargados de hacerlo todo en este país, permitan a ganaderos y agricultores desarrollar la sapiencia que le llega de sus ancestros, luego continuarán experimentando cómo producir leche para alejar el vaso de la mesa de los cubanos. Esa, acaso, será la experiencia que lleve el presidente del Parlamento venezolano a su país.