Miguel Díaz-Canel consideró "un verdadero milagro" que no se hayan producido apagones significativos a pesar de la crisis energética que atraviesa el país desde hace meses por las interrupciones del suministro de combustible.
Aún así "se han afectado producciones y otras actividades de la vida cotidiana de manera sensible" desde que el pasado septiembre comenzara la crisis, que el Gobierno calificó como "coyuntural", pero que se extiende por casi seis meses, y que no ha hecho más que agravarse, admitió en una sesión de evaluación del Ministerio de Exteriores (MINREX) en La Habana, según reportó EFE.
En el periodo se han producido interrupciones en el suministro de petróleo (principalmente desde Venezuela) a Cuba, que el Gobierno cubano atribuye a las presiones de EEUU a las navieras y aseguradoras para evitar la llegada de crudo a la Isla.
Esa situación afecta particularmente al combustible diésel, por lo que las autoridades dispusieron una serie de medidas de ajuste y ahorro en el transporte estatal, que ha provocado aglomeraciones en las paradas de las ciudades. También dispuso el Gobierno la reducción del combustible asignado a organismos y empresas, así como de los horarios de climatización en dependencias adscritas a la administración.
"Solamente con el corrimiento de la demanda en los horarios pico y la aplicación de otras medidas, hemos ahorrado más de 80 millones de dólares", anunció Díaz-Canel.
A pesar de esas restricciones, este mes la petrolera estatal venezolana PDVSA aumentó los envíos de combustible a Cuba, según fuentes y documentos de la compañía vistos por la agencia Reuters.
Seis buques, la mayoría propiedad de la unidad marítima de PDVSA, han transportado un promedio de 173.000 barriles por día (bpd) de crudo y combustible venezolano a Cuba durante febrero, según datos de Refinitiv Eikon y documentos de PDVSA. En enero, las exportaciones de PDVSA a Cuba habían caído a su nivel más bajo desde mediados de 2019, a solo 56.600 bpd.
"Están saliendo más barcos a Cuba desde hace dos semanas", dijo un supervisor naviero de un puerto de la costa occidental de Venezuela. "Van y vienen rapidísimo", añadió.
La crisis energética golpeó este mes a la industria azucarera cubana, con dos ingenios que interrumpieron las operaciones en la temporada alta de la cosecha. También ha provocado filas de más de una hora en las gasolineras, mientras que el suministro en el extremo este del país está demorado.
La Habana ha tratado de diversificar sus importaciones en las últimas semanas con buques que llegan desde Argentina, Argelia y Curazao, según los datos de Eikon.
Pero como los arribos han sido insuficientes, el Gobierno parece priorizar la generación de energía sobre el suministro de combustible para motores y para clientes industriales, dijo el analista Jorge Piñón, de la Universidad de Texas. No fue inmediatamente posible obtener datos sobre la producción nacional de combustible de Cuba.
"Todavía hay muchas cosas que no sabemos sobre cómo manejan sus niveles de suministro e inventario de crudo y productos", dijo Piñón. "Lo que está muy claro es su continua dependencia de Venezuela", añadió.
"Un día podremos explicar públicamente todo lo que se ha hecho para que no sean mayores las afectaciones", afirmó Díaz-Canel, que se mostró optimista al asegurar que "estos tiempos malos pasan y nos fortalecen".
No obstante, en las últimas semanas los cubanos han denunciado con frecuencia en las redes sociales apagones no programados ni anunciados por la Unión Eléctrica en barrios y municipios, por lo que se desconoce si son atribuibles a la escasez de diésel, la principal fuente de electricidad del país.
Ante una queja publicada en Twitter por la directora del diario independiente 14ymedio, Yoani Sánchez, quien denunció los largos apagones que experimentó su barrio, varios cubanos refirieron también cortes de electricidad.
"No solo en la Habana, en Cienfuegos también. Apagones desde temprano en la mañana hasta casi la noche", apuntó Fannia Brito.
"En mi barrio también han cortado el fluido eléctrico en varias ocasiones. Hoy en la mañana a las 7:00AM lo cortaron. El apagón duró 30 minutos. Parece que es una estrategia para ahorrar combustible recortando de poco a poco", especuló Roberto.
A las restricciones de diésel y gasolina se ha sumado también la escasez en el suministro de gas licuado de petróleo (GLP), que afecta a 1,7 millones de familias y ha dado lugar a interminables colas en las ciudades cubanas.
Apagones y falta de bebidas alcohólicas son dos situaciones que el castrismo trata de evitar a toda costa. Podrá faltar la pasta de diente, el desodorante, el jabón y la Aspirina pero no el ron; a este último ni el precio le han subido.
Las palabras de Díaz Canel son para APACIGUAR pero a la vez denotan su pánico; los castristas saben que la olla puede explotar en cualquier momento, lo que no saben es por dónde ni cuándo.
''Están saliendo más barcos a Cuba (con petróleo) desde hace dos semanas...'' 170,000 barriles diarios con seis buques. ¿Qué pensar? Si esto es verdad, el bloqueo petrolero a Cuba es un chiste.
Me imagino que con lo imbécil que es, también debe pensar que es un milagro que sea presidente. Aunque él sabe que le regalaron un televisor, pero sin el acceso al control remoto.
Cuando es que los cubanos van a abrir los ojos. Ya hace rato que el amansador de bobos útiles murió. Su hermano nunca lo fue, el Díaz estúpido ha leído todos los trucos del viejo hp pero no tienes el toque. La mayoría de los bobos útiles sabe como es el capitalismo pero todavía siguen arrodillado pidiendo limosna a los viejos y no muy viejo hp terroristas de la dictadura más larga, nunca visto en Latino América,