La Seguridad del Estado liberó este lunes por la tarde sin cargos al periodista de DIARIO DE CUBA Osmel Ramírez Álvarez, tras 72 horas de arresto.
Según explicó Ramírez, los agentes le dijeron que el motivo de la detención fue "propaganda enemiga", por los reportes que escribe para medios alternativos.
Ramírez fue arrestado el viernes por la tarde tras un fuerte operativo en su casa en Mayarí, Holguín. El sábado por la mañana fue trasladado a la unidad de la Seguridad del Estado conocida como Pedernales, en la cabecera provincial.
"En los días que pasé en Pedernales no me interrogaron, solo hablaron conmigo antes de salir. Estuve en una celda con cinco presos comunes sospechosos de crímenes, de robo con fuerza, con antecedentes penales, pero fueron muy solidarios conmigo", detalló a DIARIO DE CUBA.
"Tanto ellos como yo estábamos completamente aislados del mundo, no nos permitían comunicación con el exterior", añadió.
La estrategia de la Seguridad del Estado parece haber estado dirigida a atemorizar a la familia, incluso con engaños. Aunque Ramírez aseguró que los agentes solo hablaron con él momentos antes de liberarlo, a su esposa le dijeron que lo estaban interrogando y que el tiempo que estaría preso "dependía de él".
Idalia Torres Carballosa estuvo en Pedernales el mismo lunes por la tarde con el padre de Ramírez. Los agentes les dijeron que el periodista pasaría siete días detenido, amenazaron con enviarlo a la cárcel e intentaron persuadirlos de que lo convencieran "para que desista de lo que él cree", indicó la esposa a DIARIO DE CUBA.
Torres Carballosa y el padre de Ramírez se fueron de Pedernales bajo esa presión; sin embargo, el periodista fue liberado poco después.
"Regresaron a la casa pensando que yo iba a demorarme por lo menos siete días allá y en media hora estaba liberado. O sea, que podíamos haber regresado juntos a casa y evitarle ese sufrimiento a la familia", dijo Ramírez. "Son cosas estratégicas de ellos (las autoridades)", consideró.
Utilizar a la familia para presionar a disidentes y periodistas independientes es una práctica habitual de la Seguridad del Estado, que incluso exige a los allegados "cooperación" o les crea situaciones adversas en sus vecindarios y centros de trabajo.
El operativo aparatoso en la casa de Ramírez habría tenido el mismo objetivo.
"Fue una cosa terrible. Una cantidad de vehículos, de agentes, un show en el barrio tremendo", relató el periodista.
Las autoridades incautaron "una computadora nueva y una vieja que había arreglado, teléfono, papeles, mi disco duro, memorias, incluidas algunas que no son mías y la de la niña ver muñequitos", detalló. "Dicen que no me van a devolver nada de eso, que es 'material subversivo'".
Al liberarlo, los oficiales de la Seguridad del Estado le dijeron que está "desprestigiando al municipio (Mayarí) y a la Revolución", indicó Ramírez.
"Ellos lo ven así. No entienden la labor del periodismo para nada. Reconocen que hablamos de cosas reales que suceden, pero no entienden que deben ser divulgadas y menos en medios alternativos para que personas que no simpatizan con la Revolución las conozcan y debatan", señaló el periodista. "Tienen una mentalidad distorsionada sobre ese asunto".
Ramírez, quien también es productor de tabaco, dijo que durante su detención fue tratado con respeto. "Claro, ya el hecho de que me recluyan así fue una vejación", apuntó.
Osmel Ramírez Álvarez, quien escribe también para Havana Times, ha reportado para DIARIO DE CUBA sobre los abusos de la estatal Cubatabaco contra los vegueros de su localidad. Asimismo, ha informado sobre las violaciones de la Ley Electoral y la Constitución cometidas por las autoridades de Mayarí para impedir que un candidato independiente se presentara a las Asambleas de Nominación.
En agosto pasado, el periodista fue amenazado con la cárcel por su trabajo para DIARIO DE CUBA. En ese momento, la Seguridad del Estado incluso presionó a sus familiares.
Varios periodistas de DIARIO DE CUBA han sufrido detenciones, amenazas en los últimos meses. Entre ellos, Manuel Alejandro León, de Guantánamo; Maykel González Vivero, de Villa Clara, y Frank Correa, de La Habana. Asimismo, las autoridades han impedido viajar al exterior a Joan Manuel Núñez y Yusimí Rodríguez.