Operativos organizados por la Seguridad del Estado detuvieron el viernes y el sábado a varias mujeres del Movimiento Dignidad a quienes el régimen impide salir desde hace meses de la localidad de Palmarito de Cauto, en Santiago de Cuba, informaron fuentes de la organización.
Desde que el movimiento, liderado por la activista Belkis Cantillo Ramírez, se dio a conocer en diciembre pasado, la Seguridad del Estado ha mantenido una fuerte presión sobre sus integrantes, recordó a DIARIO DE CUBA Maidolis Oribe, una de las arrestadas este fin de semana.
"Son diez meses que no nos dejan salir de Palmarito de Cauto", declaró Oribe. "Dentro de la misma localidad han puesto un punto de control en el que detienen a cada opositor que intenta salir y lo obligan a regresar al pueblo".
La activista indicó que este viernes ella, Belkis Cantillo y la hija de esta, Fátima Ferrer Cantillo, de 12 años de edad, fueron arrestadas porque decidieron salir del pueblo.
"Nos dirigíamos hacia Santiago de Cuba porque ya está bueno ya, nos cansamos, decidimos que no podíamos seguir presas dentro de Palmarito porque ellos quieran", indicó Oribe.
Añadió que, tras ser liberadas, decidieron convocar a otras integrantes del grupo para volver a intentar salir del poblado este viernes por la mañana. Diez mujeres y un miembro de la Unión Patriótica de Cuba fueron arrestados por eso.
"Era un operativo represivo fuerte, querían golpear a las mujeres con tonfas. Muchas mujeres fueron trasladadas en ómnibus hacia Palma Soriano, otras fuimos a calabozos", relató Oribe.
En el momento de redactar esta noticia ya todos los detenidos habían sido liberados.
"Ya les dejamos bien claro que el Movimiento Dignidad va a salir todos los domingos a participar en la misa dominical. Ellos nos detendrán, harán lo que quieran. La amenaza son 96 horas de calabozo, multas y prisión", advirtió Oribe.
Identificó al agente de la Seguridad del Estado Dainier Suárez Pagán como uno de los principales encargados de aplicar la represión contra el grupo.
"Nos dijo que están en guerra contra nosotras porque nosotras no respetamos", destacó Oribe.
El Movimiento Dignidad denunció en un comunicado "la represión y detención arbitrarias" de las activistas que "salieron a las calles para reclamar su derecho ciudadano a ejercer la libertad de libre movimiento y comunicación".
Desde que el Movimiento Dignidad fuera fundado, las activistas de Palmarito de Cauto han sufrido acciones "que nunca han sido siquiera avaladas por un tribunal de la dictadura", criticó la organización. "Se les impone arbitrarias restricciones de movimiento equivalentes a un arresto domiciliario, se les prohíbe viajar a otras localidades en la zona oriental del país y se les niega la posibilidad de tener líneas telefónicas para mantenerlas incomunicadas", detalló la organización.
"Tanto teme la dictadura al Movimiento Dignidad que creyendo que estaba localizado solamente en Palmarito de Cauto impuso desde entonces un estricto control a cualquier persona para acceder o salir del pueblo. Creían que podrían contener con un cordón sanitario al Movimiento Dignidad, como si se tratase de una contagiosa epidemia ideológica. Desconocían que mientras se dedicaban a esas deplorables tareas, el Movimiento crecía de forma paralela en la zona central y occidental del país", aseguró el grupo.
"No cejaremos hasta que a) se abran las prisiones a inspecciones independientes de organizaciones internacionales, b) sea abolida la llamada 'peligrosidad pre-delictiva' y c) se otorgue una amnistía inmediata e incondicional a todas las personas hoy encarceladas bajo esa monstruosidad jurídica", concluyó la organización.