El régimen condenó en la mañana de este lunes a arresto domiciliario a la periodista independiente Sol García Basulto, según denunció ella misma a DIARIO DE CUBA.
"Me llamaron este lunes a las 9:00 de la mañana para decirme que a las 10:00 tenía que estar en la unidad número tres de la policía en Camagüey, que había novedades con mi caso. Fui hacia allá. Oficialmente estuve detenida más de una hora. Me dieron la libertad bajo medida cautelar", detalló García Basulto.
Este lunes a la periodista le fue impuesta "una medida cautelar consistente en prisión domiciliar". Ahora se encuentra a la espera de juicio.
Desde el pasado mes de marzo, el régimen acusa a García Basulto del presunto "delito de usurpación de la capacidad legal" por "hacer entrevistas en la vía pública y publicarlas en la revista La Hora de Cuba".
"Soy inocente de usurpación de nada. Siempre he ejercido mi libertad de expresión, palabra y prensa registradas en la Constitución de la República y en la Declaración Internacional de los Derechos Humanos", denunció la joven.
Sobre el arresto domiciliario explicó: "No puedo salir de mi lugar de residencia, no puedo hacer vida social normal. Solo puedo salir de mi domicilio para trabajar o por problemas de salud. En mi caso, hay bastantes trabas porque no tengo domicilio ni casa. Yo vivo donde puedo: en casa de familiares; cuando puedo alquilar, alquilo. Quedamos en que tengo que reportar constantemente el lugar donde esté y no puedo salir de la provincia que es lo que más les preocupa a ellos".
Asimismo, señaló que su caso ahora está siendo llevado por la policía política.
"El expediente fue trasladado. En un principio el caso estaba en manos de la Policía. Ahora es oficial que se trata de la Seguridad del Estado. Desde el principio sospechamos que se trataba de ellos y que solo estaban usando a la Policía", precisó la periodista.
El oficial que está atendiendo el caso es Yusniel Pérez Estrada, primer teniente de Operaciones Territoriales, según explicó García Basulto, quien pidió a la prensa extranjera y a la opinión internacional que contactaran a este oficial.
"Para más información llamen al primer teniente Yusniel, este es el número de su oficina: 5332278268. Se los agradecería mucho por este apoyo", precisó.
Además, la periodista señaló que este lunes le "levantaron cuatro actas: la de detención, la de libertad, la de prisión domiciliar y la declaración de acusado" y "no le dieron copia de ninguna".
"Me dijeron que ellos tenían un plazo de 60 días para seguir investigando. Es falso: en un caso de un delito sumario como este se trata de diez a 20 días", condenó.
Henry Constantín Ferreiro, director de La Hora de Cuba, quien también está siendo acusado de "usurpación de la capacidad legal" acompañó a García Basulto a la unidad.
"Yo le pregunté al agente por el caso de Henry y me dijo que él sería notificado más adelante. Pero lo más probable es que la medida sea la misma", explicó la periodista.
En los últimos meses el régimen le ha impedido a García Basulto llegar a La Habana y viajar a Panamá, la detuvo en noviembre y le ha prohibido ejercer el periodismo.
Según explicó García Basulto a DDC, la sanción por el delito de usurpación de la capacidad legal es de "entre tres meses y un año de privación de libertad o una multa de 100 a 300 cuotas".
De acuerdo con el Artículo 149 del Código Penal incurre en este delito quien "con ánimo de lucro u otro fin malicioso, o causando daño o perjuicio a otro, realice actos propios de una profesión para cuyo ejercicio no está debidamente habilitado".
En mayo, en entrevista con este diario, la joven (madre soltera que tiene un niño de tres años) afirmó que los agentes de la Seguridad del Estado no la dejaban "llevar una vida normal" y que "interrumpían en cualquier momento".
"Muchas personas intentan persuadirme de los riesgos que tiene esta carrera (el periodismo) y me dicen que lo deje por mi hijo. No saben que funciona a la inversa: lo hago por mi hijo, porque no soporto la idea de llevarlo a una escuela donde lo obligarán a repetir consignas mediocres que hablan de muerte y de ser como asesinos. Tampoco voy a separarlo de su familia sacándolo del país, porque él no solo me tiene a mí, también tiene padre, abuelos, tíos, una familia que lo ama y el derecho de estar con ellos. Lo correcto es estar aquí y señalar lo que no está bien", concluyó García Basulto.