El periodista independiente de La Hora de Cuba, Henry Constantín, fue detenido por agentes de la Seguridad del Estado en el Aeropuerto Internacional Ignacio Agramonte, de Camagüey.
Constantín relató a DIARIO DE CUBA que regresaba después de una estancia de 14 días en Estados Unidos, adonde había viajado para participar de un seminario organizado por el Centro de Estudios Cubanos y Cubanoamericanos en la Universidad de Miami.
A su llegada al aeropuerto le "estaban esperando", dijo el periodista. Un agente vestido de civil y con una identificación de "invitado", que se le presentó como Frank, dio la orden de registro.
Según Constantín, las autoridades le revisaron todos sus efectos personales y se quedaron con su teléfono móvil, su laptop y una memoria flash.
Los agentes de la Aduana lo amenazaron con sanciones por "desacato a la autoridad" o "resistencia" si se negaba a dejar sus objetos personales. Finalmente le pusieron una multa de 500 pesos por supuestamente "obstruir" su trabajo, contó el periodista.
Constantín dijo que del aeropuerto fue trasladado esposado a la Unidad Provincial de Instrucción (en el reparto de Montecarlo).
Allí el primer teniente instructor José Ángel Rodríguez Soto le levantó un acta. Constantín aseguró que se negó a firmarla por tener datos incorrectos: se le categorizaba como desempleado (cuando trabaja como periodista) y tampoco se especificaba el tipo de teléfono que le requisaban.
El periodista dijo que durante las horas que permaneció en la comisaría un perito criminalístico que afirmó apellidarse Basulto Baryol revisó sus efectos digitales en su presencia y se quedó con ellos. Incluso, llegó a pedirle que le diera el cargador y el adaptador de la laptop porque en la unidad no tienen adaptadores de 220 a 110 watt.
Según Constantín, la policía le tomó huellas digitales y lo liberó a las 10:30 de la noche.
Este lunes, el periodista se encontraba nuevamente en el aeropuerto a la espera de que le devolvieran el resto de su equipaje, en el que aún hay otros dispositivos electrónicos que teme hayan podido ser confiscados también, reveló.
En las últimas semanas este es el segundo hecho represivo de la Seguridad del Estado contra La Hora de Cuba. El pasado 3 de noviembre la periodista independiente Sol García Basulto fue también detenida y acusada por agentes del régimen.
La Hora de Cuba ha tenido problemas desde agosto, dijo Constantín.
Miembros del equipo han sido amenazados con no dejarlos graduarse de periodismo en la universidad o de ser sancionados, denunció.
Agentes de la Seguridad del Estado han visitado y atemorizado a las familias de dos miembros de La Hora de Cuba, incluida la abuela de uno de los periodistas, añadió.
Hasta ahora el caso más grave es el de Sol García Basulto por el proceso legal abierto en su contra por el cargo de "resistencia".
Constantín opinó que las autoridades "le tienen mucho miedo a La Hora de Cuba" y en general a todos los proyectos independientes.
En las últimas dos semanas, contó Henry Constantín, ha habido dos juicios a cuentapropistas en Camagüey. El primero de ellos a un periodista que también tiene un pequeño negocio y al que las autoridades han pedido 18 meses de cárcel. El segundo juicio ha sido a dos cuentapropistas que gritaron "¡Abajo Fidel!" a los que la Fiscalía pide cinco años de privación de libertad.