El régimen destituyó de su cargo al ensayista Roberto Zurbano por sus críticas sobre el racismo en la Isla, confirmó DIARIO DE CUBA a través de varias fuentes.
Zurbano se desempeñaba como director del Fondo Editorial de esa institución. Ahora la responsabilidad ha recaído "provisionalmente" en Nisleidys Flores Carmona, la subdirectora.
En un artículo en The New York Times, cuya versión DDC distribuyó ampliamente dentro de la Isla, Zurbano dijo que "para los negros cubanos, la revolución no ha comenzado".
El ensayista señaló además que los resultados de las medidas económicas puestas en marcha por Raúl Castro "dependen del color de la piel".
"El sector privado de la Isla disfruta ahora de cierto grado de liberación económica, pero los negros no están bien posicionados para sacar ventaja de ello", advirtió y criticó que en sus 54 años en el poder el Gobierno cubano haya sido "incapaz de superar" el racismo.
Antirracistas apoyan la libertad de expresión
Zurbano fue despedido de su cargo, a pesar de que la Articulación Regional de Afrodescendientes de Latinoamérica y el Caribe, en su Capítulo Cubano (ARAC), había afirmado el jueves que se oponía a "procedimientos institucionales" de "carácter obstructivo o represivo" contra cualquier participante en la polémica.
ARAC señaló que "apoya y apoyará resueltamente la libre expresión de ideas por todos sus activistas, como parte de la imprescindible libertad de expresión", según un comunicado publicado por el Observatorio Crítico.
En la primera parte de la nota, el grupo dejó en claro que "el antirracismo radical" es parte del "proceso revolucionario cubano, uno de cuyos momentos cumbre ha sido el triunfo insurreccional de enero de 1959".
Según una de las fuentes consultadas, Zurbano permanecerá como investigador, sin responsabilidades ejecutivas, en Casa de las Américas.
Se veía venir
Esta semana, varias publicaciones oficialistas cuestionaron severamente el artículo de Zurbano.
El fuego lo abrió el ensayista Guillermo Rodríguez Rivera al considerar "escandalosas" las afirmaciones de su colega sobre el racismo en Cuba.
Mientras tanto, en La Jiribilla, salieron en tromba a criticarlo. "En el órgano equivocado y el lenguaje equivocado", tituló uno de los artículos. Otro dice que Zurbano "se aparta del consenso al que han arribado los investigadores cubanos más serios".
"Ahora, la lucha por la igualdad racial tendrá que contar con la eventualidad de una fisura en el ideario y la acción de los mejores cubanos. Y la fisura les ha hecho un favor a los enemigos de la Revolución", añade.
En el improvisado dossier, el académico Esteban Morales considera que "habría que ser poseedor de una ignorancia histórica extraordinaria para pensar que un cambio de liderazgo político en Cuba pudiera beneficiar a los negros".