Cuba está entre los 25 países con un sistema penitenciario "al límite" debido a la población total de reclusos y el número de presos por cada 100.000 habitantes, informa el sitio en internet Esglobal, antes Foreign Policy en Español.
"La situación de las cárceles en un país suele reflejar las virtudes y, demasiado a menudo, los defectos del Estado que las gestiona y de su sistema de justicia", advierte Esblogal, editado por la Fundación española para las Relaciones Internacionales y el Diálogo Exterior (FRIDE).
La lista, para cuya elaboración se utilizaron datos del Centro Internacional para Estudios de Penitenciarios, de la Universidad inglesa de Essex, está encabezada por Estados Unidos, con 2,3 millones de reclusos en sus cárceles, 730 por cada 100.000 habitantes.
"Estados Unidos cuenta con un 25% de los presos del mundo (…) China, con un número de habitantes cuatro veces superior al de Estados Unidos, cuenta con 1,6 millones de reclusos", compara la publicación.
"La población penitenciaria en Estados Unidos se ha doblado en los últimos 15 años" y cuadruplicado desde 1980, añade. Critica, además, de la vigencia de la pena de muerte en el país y "la desigualdad a la hora de condenar a los enjuiciados en función de su origen racial".
"En torno a un 60% de los presos estadounidenses son afroamericanos o hispanos, mientras que ambas comunidades representan tan solo el 30% de la población estadounidense", dice.
Asimismo, señala la privatización de centros penitenciarios y la utilización de los reclusos como "mano de obra casi gratuita".
Esglobal, cuestiona que, "a pesar de sus promesas, la Administración Obama no ha cerrado aún una de las cárceles estadounidenses más cuestionables, la de Guantánamo".
La sexta tasa de población penal más alta del mundo
En cuanto a Cuba, el sitio en internet señala que tiene la sexta tasa de población penal más alta del mundo, con 510 presos por cada 100.000 habitantes. Eso teniendo en cuenta los datos oficiales, que organizaciones de derechos humanos rechazan.
"En las cárceles cubanas se han detectado, según organizaciones como el Comité para la tortura de la ONU, varias deficiencias: maltrato a algunos presos, muertes de presos no aclaradas, altas tasas de ocupación carcelaria por metro cuadrado o falta de garantías de algunos detenidos. También se han denunciado las detenciones temporales y los procesos por motivos políticos", dice Esglobal.
Señala que "en la legislación cubana no se contempla expresamente el crimen de tortura"; en cambio, "sí contempla la pena de muerte, aunque su aplicación se encuentra actualmente suspendida".
El Gobierno cubano, que desde hace décadas no permite que organizaciones internacionales como Cruz Roja y Amnistía Internacional visiten sus cárceles, publicó en mayo de 2012 que el número de reclusos existentes en Isla era de 57.337.
Sin embargo, grupos como la opositora de Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN) ponen en duda esa cifra y creen que la real está entre 70.000 y 80.000.
Al igual que en Estados Unidos, los presos cubanos son utilizados como mano de obra casi gratuita y la mayoría de la población penal está formada por mestizos y negros, según denuncian activistas contra la discriminación racial.
El Comité de Naciones Unidas contra la Tortura dijo el año pasado que en 2010 murieron en prisión 44 reos cubanos y otros 69 fallecieron en hospitales; en 2011 perdieron la vida en la cárcel 29 prisioneros y 60 mientras recibían atención médica.
La CCDHRN dijo en febrero de este año, en su informe mensual sobre la represión en la Isla, que la menos una veintena de reclusos habían muerto en las prisiones de la Isla en los anteriores cinco meses.
En la lista de Esglobal aparecen también varias islas de las Antillas, con Saint Kitts and Nevis como el peor caso, ubicado detrás de Estados Unidos con 649 presos por cada 100.000 habitantes.
Mejor situación que la de Cuba presenta República Dominicana, con 356 presos por cada 100.000 habitantes, de acuerdo con el reporte.
En América Latina, la lista de Esglobal resalta el caso de El Salvador, que tiene sus instalaciones carcelarias al 253% de su capacidad.
En peor condición están las prisiones venezolanas, al 270% de su capacidad de internamiento.
Tras su llegada el poder, el fallecido Hugo Chávez "prometió una restructuración completa del sistema penitenciario venezolano que incluía la construcción de 24 nuevos presidios", pero "de los nuevos centros prometidos solo se han construido cuatro en los últimos años", dice la publicación.
Otro grave "problema de las cárceles venezolanas es la violencia entre bandas que cuentan incluso con armas de fuego. Se calcula que en 2012 habrían fallecido unos 500 reclusos a causa de los motines".
En enero de este año, 50 reclusos fallecieron en una prisión del centro del país.
México, otro de los países más violentos de América Latina, tiene sus cárceles al 124% de su capacidad y en ellas existe un alto control por parte del crimen organizado sobre la población penal y los funcionarios de prisión.
En cuanto a China, el reporte indica que tiene 121 reos por cada 100.000 habitantes. Además de la crueldad de sus cárceles y la existencia de instituciones en las que, según algunas organizaciones de derechos humanos, estarían internados ciudadanos "sin un proceso judicial previo e incluso sin una detención formal", Esglobal señala que en las prisiones chinas "se producen cada año decenas de muertes no aclaradas" y extracciones de órganos a ejecutados para utilizarlos en trasplantes.
Georgia tiene unos 473 prisioneros por cada cien 100 habitantes; Bielorrusia, 438, y Rusia, 490.
"Los problemas de un sistema penitenciario son, en la mayoría de los casos, el reflejo de los problemas que tiene esa sociedad: desigualdad social, falta de libertades y, sobre todo, un sistema de justicia penal con muchos aspectos cuando menos cuestionables", considera Esglobal.