Los entrenamientos primaverales constituyen el paso previo al inicio de la temporada de Grandes Ligas. Con 35 jugadores nacidos en Cuba en diferentes organizaciones, el reto de prepararse y buscar un puesto en sus respectivas alineaciones de cara a la campaña 2018 acaba de comenzar. Aquí presentamos un ránking de los 23 peloteros que ya entrenan y que aún no forman parte de sus respectivos equipos:
23. Lourdes Gurriel Jr., jugador de cuadro, Azulejos de Toronto
El infielder espirituano, de 24 años, recibió el visto bueno de la organización para participar en los entrenamientos primaverales. Pero eso será solo una prueba de fogueo para un jugador que debería aprovechar el tiempo, estando cerca de sus compatriotas Kendrys Morales y Aledmys Díaz. Tener de cerca también a Josh Donaldson es una oportunidad dorada de aprendizaje, pues quién sabe si Gurriel Jr. sea el sucesor del MVP de la Liga Americana en 2015.
Lourdes es un diamante en bruto, que puede batear jonrones en el futuro, pero todavía deberá ser capaz de hacer una mejor selección de pitcheos en el cajón de bateo. Su tasa de ponches en Doble A fue de 16.2% en 185 apariciones al plato, lo suficiente para que las proyecciones de ZiPS en FanGraphs lo ubiquen con un 17.3% en 468 comparecencias de para 2018 (ya sea en Ligas Menores o en las Mayores).
Perspectivas inmediatas: Comenzar a trabajar con el swing, pues ya es tiempo de que elimine sus tendencias a halar todas las pelotas. En Doble A, promedió una tasa de 30.2 IFFB% (elevados al infield), lo que demuestra su falta de ritmo al golpear la pelota en sus intentos de llevarla a los jardines. Es algo que puede y debe cambiar. En cuanto a la defensiva, todavía parece estar lejos de convertirse en el short stop que quiso ser en Cuba. No obstante, su brazo y desplazamiento lo ayudan, así que solo trabajando podrá pulir cualquier deficiencia.
¿Cómo escalar a un nivel superior?: Todo está en que aproveche las oportunidades que podría recibir tras una eventual salida de Donaldson u otro canje del equipo en el futuro cercano. La inversión de los Blue Jays indica que quieren tenerlo como un jugador de regular, y por esa parte están dando los pasos pertinentes. Lo demás, queda por Gurriel Jr., quien deberá hacer más que solo mostrar su talento.
22. Rusney Castillo, jardinero, Medias Rojas de Boston
El último juego del avileño con los Medias Rojas fue el lejano 16 de junio de 2016, durante una derrota por 5-1 frente a los Orioles de Baltimore. De sus nueve apariciones con Boston, solo en la primera (el 9 de abril) y esa última, Castillo consiguió iniciar en el line up regular. Es un dato revelador de que Castillo no despertó mucho interés en la organización. Con un jugador que le ha costado más de 11 millones por año al equipo (al menos desde 2015), la decepción parece ser el sentimiento prevaleciente. Veamos una breve comparación:
Entre 2014 y 2016, Boston tenía tres outfielders con grandes perspectivas futuras, y Rusney Castillo encabezaba esa lista. Detrás de él, Mookie Betts y Jackie Bradley Jr. parecían jugadores de refuerzo para el último mes de la temporada. Al final, sin embargo, ambos le superaron de una manera sorprendente. ¿Qué tan increíble fue? Los números hablan por sí solos:
HR/RBIs - Entre 2014-2016: Betts, 54/208; Bradley Jr., 37/160; Castillo, 7/35.Desde entonces, Castillo no ha sido más que una espina en la garganta de los Medias Rojas.
Perspectivas inmediatas: Mostrarle al manager Alex Cora –al menos por una vez— que él puede regresar y aportar a la plantilla. Castillo trabajó duro en el invierno y tuvo una aceptable Serie del Caribe a inicios de febrero. Pero eso aún no es sinónimo de que podrá convencer a su team de traerlo al roster de los 40.
¿Cómo escalar a un nivel superior?: Explotar todo el potencial que aún posee. No es que sea imposible, aunque a sus 30 años, correr, batear y llevar la pelota por encima del "monstruo verde" parece cada vez más difícil.
21. Roenis Elías, lanzador zurdo, Medias Rojas de Boston
El guantanamero se despidió de los Marineros de Seattle con dos campañas positivas en el WAR (1.4 y 0.7) en 2014 y 2015, respectivamente, con 49 aperturas para un equipo que ni se asomó a las puertas de la postemporada. Luego llegaron las lesiones. Desde entonces, Elías apenas ha lanzado ocho innings en las Grandes Ligas, 7.1 en 2016 y 0.1 en 2017.
Perspectivas inmediatas: Luchar en los entrenamientos primaverales por un puesto como quinto abridor del equipo.
¿Cómo escalar a un nivel superior?: Implementar en su repertorio el slider, que bien podría hacer daño si la combina con su curva. Elías lanzó dos ceros contra los Rayos de Tampa el pasado 26 de febrero y se vio bien enfocado, mezclando su nuevo repertorio, que también cuenta con un cambio de velocidad.