En poco tiempo el ring de boxeo pudiera dejar de ser un espacio vedado para las mujeres de la Isla, imposibilitadas de practicar ese deporte de manera oficial, informa Inter Press Service (IPS).
Según reportes de prensa citados por el medio, Alberto Puig, presidente de la Federación Cubana de Boxeo, comunicó que se estudia la posibilidad de promover la práctica del pugilismo entre las mujeres e incursionar en venideros eventos internacionales.
El funcionario precisó que las máximas autoridades del sector a nivel mundial exigen la inscripción de dos boxeadoras por nación en la Serie Mundial del próximo año, competición donde el elenco cubano rige como campeón.
Puig agregó, además, que la Asociación Internacional de Boxeo Aficionado (AIBA) proyecta aumentar la participación de las mujeres en certámenes de primer nivel como los Juegos Olímpicos, donde ya compiten en las divisiones de 51, 60 y 75 kilogramos, respectivamente.
La Isla ha sido reconocida históricamente como una potente cantera en el "deporte de los puños" y sus pugilistas han obtenido 71 medallas de oro en campeonatos mundiales y 34 en citas olímpicas, y en ambos casos son de los más destacados. Sin embargo, las mujeres no están autorizadas a competir de manera oficial.
El tema se debate
Para Rosangel Martínez, de 42 años, "no debe aprobarse" la práctica del boxeo femenino en el país, porque "no es algo adecuado o lindo en mujeres".
"No imagino a dos muchachas dándose piñazos y mi familia viéndolo en la televisión", acotó esta vecina de Centro Habana, quien fue atleta de esgrima en su adolescencia.
Sin embargo, Danis Navarro, del municipio Plaza, lo ve sin prejuicios y "tan normal como el judo, el kárate, el taekwondo, la lucha libre y otros deportes donde verlas es habitual".
El joven de 25 años pronosticó que "con las boxeadoras quizás en poco tiempo podrían ganarse muchas más medallas para el país en la competencias más importantes".
También suelen ser favorables los criterios expresados por una parte de la prensa especializada en temas deportivos, señala IPS.
Mayli Estévez, del periódico Vanguardia, expresó a la Redacción de IPS Cuba que "la aprobación del boxeo femenino es simplemente el reconocimiento a un derecho de las mujeres a desempeñarse de manera oficial en cualquier deporte y lo contrario sería discriminarlas".
La comunicadora agregó que "hasta el momento todas las razones negativas dadas por los federativos nacionales están sustentadas en estereotipos de género".
"Desde hace mucho en Cuba hay mujeres que desean boxear y tienen todo el derecho a hacerlo", insistió.
Estévez refirió como "lamentable que esta posibilidad latente de que las cubanas ingresen al ring haya llegado por presiones internacionales o por cumplir con un reglamento" y no por un pronunciamiento de "respeto a sus derechos".
Dayán García, redactor de la revista Bohemia, señaló a su vez que las mujeres tienen muchas potencialidades, "sobre todo por la historia y la tradición de la escuela cubana".
No obstante, precisó que el Gobierno se ha "demorado mucho y ahora podría ocurrir lo mismo que con la lucha libre o el levantamiento de pesas, donde se ha hecho difícil recuperar el tiempo perdido y los resultados actuales son discretos".
¿Cubanas sobre el ring?
Varias páginas digitales hacen referencia a boxeadoras de la Isla antes de 1959 y a algunos intentos en años recientes.
Algunos artículos relatan la historia de Felicia Mesa Zamá, quien en los años 50 del pasado siglo disputó más de una decena de combates profesionales en la división de 180 libras.
Nacida en 1918, la expugilista vive aún en el municipio Sagua La Grande, en la provincia de Villa Clara, a unos 270 kilómetros de La Habana.
Durante sus años como boxeadora se le conoció como "La Pantera Sagüera" y las páginas deportivas de la época elogiaron la potencia de su mano izquierda.
La historia más actual de una exponente cubana trascendió en el documental Boxeadora, que narra la historia de Namibia Flores, extaekwondoca que practicaba con hombres en el gimnasio Rafael Trejo, en la Habana Vieja.
Producido por la cineasta norteamericana Meg Smaker, el audiovisual de 16 minutos refleja el sacrificio de la cubana que durante siete años entrenó, pero no pudo competir en eventos oficiales.
Nardo Mestre, quien fuera entrenador de Flores, explicó a la Redacción de IPS Cuba, vía telefónica, que su pupila "ya no puede subir al ring en torneos de la Federación Cubana u organizados por la AIBA, porque la edad límite estipulada es de 40 años y justo los cumplió en febrero pasado".
Cambio de perspectiva
Con la inclusión de mujeres boxeadoras en los Juegos Panamericanos de Guadalajara 2011 y los Juegos Olímpicos de 2012, el tema volvió de manera tenue a la palestra pública en Cuba.
El reportaje investigativo Ellas desde la esquina, de la periodista Mayli Estévez y su colega Carlos Rodríguez, suscribe que hace cuatro años el actual dirigente del boxeo en la Isla declaró a medios internacionales que "no estaban cerrados a la idea" y "se estaba evaluando".
El texto agrega que en 2013, el propio dirigente expresó que no ubicaba a las mujeres "con guantes de boxeo (…)".
Las opiniones iniciales se matizaron un poco cuando Puig expresó a la cadena estadounidense ESPN que cuando "se decida incorporar el boxeo femenino", hay "atletas de otros deportes con una preparación física excelente".
Más apegado a la idea de una futura aprobación, el federativo reconoció el pasado 7 de junio ante la prensa oficial que "existen individualidades con experiencia en la práctica de la disciplina y con potencialidades para intervenir con éxito en certámenes foráneos".
El mencionado artículo reveló que cinco jóvenes taekwondocas entrenan boxeo en uno de los Centros de Alto Rendimiento de la capital cubana.
"Las muchachas están insertadas como boxeadoras, en la matrícula de esta disciplina", aseguró Alaín Ramírez, metodólogo provincial de boxeo en Villa Clara, provincia donde algunas adolescentes han comenzado escalar el cuadrilátero.
"La Comisión Nacional nos dijo que fuéramos enseñando a las muchachitas que tuvieran interés en el boxeo, aunque no se había aprobado nada aún", afirmó Jesús Pérez, entrenador de boxeo de la Escuela de Iniciación Deportiva (EIDE) Héctor Ruiz.
Por su parte, el entrenador capitalino Nardo Mestre confirmó a la Redacción de IPS Cuba que en la Habana Vieja entrenan "jóvenes cuyas edades oscilan entre 17 y 18 años".
Incluso, anunció que este miércoles 15 de junio las pugilistas protagonizarán "un sparring (tope), donde demostrarán su calidad y cuán preparadas están para triunfar en el boxeo".