En el año 2015 de la emigración del béisbol cubano (101 peloteros), una provincia y un equipo han sido líderes.
Les presento a la novena de Pinar del Río, desintegrada como por obra y gracia del mago Houdini.
Hablamos de un equipo campeón (2014), que de haber permanecido intacto habría amenazado con más cetros. Pero, ¿qué sucedió? Los Vegueros vieron emigrar a 17 jugadores de su nómina, y han perdido para siempre a su mayor jonronero en activo.
No es la primera disolución de una novena en la historia del béisbol nacional. Tenemos a Villa Clara en mitad de los 90 y a los Elefantes de Cienfuegos a partir de 2012. La única salvedad aquí, es que estos se diluyeron gradualmente. En Pinar del Río la disolución se hizo en menos de ocho meses.
¿Desmotivación en las filas?
Tras ganar la Serie 53 contra viento y marea, en el retorno de su piloto Alfonso Urquiola, los Vegueros mantuvieron su nómina intacta en 2014. Nadie emigró. Durante la Serie 54 (octubre 2014) fui hasta su clubhouse en el peor momento posible, cuando atravesaban una racha de siete victorias y 13 fracasos, y las caras de desilusión eran alarmantes.
"Imagínate, dos veces campeones nacionales en cuatro años y no tenían mejoras económicas", me dijo una fuente que no quiso revelar su identidad.
Caminé con Urquiola desde el banco hasta el jardín central. Allí, él supervisaría el entrenamiento. Me iba hablando de las injusticias de la Federación con el equipo y del desorden del calendario.
La única motivación era la Serie de Caribe: "Si no voy a la Serie del Caribe, cuelgo los guantes", me dijo un jugador.
Otros ni siquiera eso: "No jugué la Serie del Caribe con Pinar pues no me sentía motivado; no por ser campeones, pero creo que debimos haber tenido más atenciones", me aseguró Lorenzo Quintana, receptor y pieza ofensiva básica que dejó el equipo en el mes de enero.
Serie del Caribe. ¿Unión o destrucción?
Y llegó la Serie del Caribe (SC). Unos decían que Pinar del Río era Cuba. Otros que Cuba era Pinar del Río. Finalmente asistieron a San Juan 10 pinareños de entre 28 jugadores. La Federación Cubana de Béisbol (FCB), ávida de triunfos en el extranjero, envió a una selección nacional a un torneo de clubes.
"Los que se fueron del equipo no fue cuestión solamente de Serie del Caribe", me dijo Randy Arozarena. Sin embargo, la disolución llegó luego de febrero, y actualmente ya son 17 pinareños los que no están con el team.
Ellos son: Lorenzo Quintana (antes de la SC), Julio A. Martínez (antes de la SC), Vladimir Gutiérrez, Yoel Rojas, Lázaro Alonso, Osniel Madera, Luis Valdés, Randy Arozarena, Yosviel Vilaú, Maikel Serrano, Yosvani Peraza (sanción), Yunior Valiente, Yanciel Ajete, Rafael Reyes, Bárbaro Urquiola, David Castillo (baja) y Rodry Yasmani Castelló.
"¿Por qué decidiste dejar el equipo de Pinar y abandonar Cuba?", le pregunté a Osniel Madera, jardinero y utility quien fuera el héroe de la final en la Serie 53 y que no recibió visa para Puerto Rico. "Me fui por el futuro de mi familia, porque sentía que podría jugar otra pelota y por la Serie del Caribe".
Sufrido destino
En 2015 Pinar del Río ha sido "el equipo del dolor" en Cuba. Ningún otro ha sufrido tanto el drama de perder todo un lineup que se tardó un lustro en construir. Este es el lineup del primer día de 2014:
2014
Randy Arozarena
Lorenzo Quintana
Donal Duarte
Yosvani Peraza
William Saavedra
Luis A. Valdés
Osniel Madera
David Castillo
Reinier León
Y este es el lineup del pasado 30 de agosto:
2015
Juan Carlos Arencibia
Reidel Álvarez
Donal Duarte
William Saavedra
Dayron Hernández
Lázaro Emilio Blanco
Olber Peña
Maddiel Pérez
Reinier León
En la actual campaña solo repiten tres jugadores que pasan de los 30 años: el inmortal capitán Duarte, el internacional William Saavedra y el veterano Reinier León.
La FCB contribuyó a que el trono de Pinar del Río declinara. ¿Por qué?
Pues por la puesta en marcha de un calendario ridículo, donde el campeón jugó partidos incluso a las 10 am en Isla de la Juventud y Artemisa.
Por una hoja de ruta increíble: viajar a Santiago de Cuba y luego a Santa Clara para más tarde regresar a Guantánamo.
Por decisiones arbitrales despreciables: un foul de Yulieski Gourriel en el Latino que fue jonrón y provocó dos derrotas, y la más fuerte: la sanción de 12 juegos al manager Urquiola por sacar el equipo de la grama.
Finalmente, cuando se necesitaba jugar en horarios simultáneos el último partido de la temporada, esto no ocurrió y Pinar del Río no pudo clasificar.
Es un nudo muy difícil de desamarrar.
Adiós al presente y al futuro
Es imposible perder en un mismo año el presente y el futuro. Son 17 jugadores que han burlado las redes del estancamiento y han ido a la búsqueda de un nuevo destino. Prospectos casi todos que perseguirán contratos de Grandes Ligas.
En todo este tema parece alojarse un misterio, pero las causas y efectos son los mismos y las respuestas no son otras que las conocidas: "Queremos insertarnos en otras ligas y probarnos. En Cuba solo hay un techo: el equipo nacional. De ahí para allá no pasas", comentó Bárbaro Urquiola.