En los cantones no
ni en las fronteras
al paso de la gripe aviar
o el menos veloz (dicen)
virus del Nilo
Pero en cuanto a cerilla
le debo una corrección
En el orbe todo nadie dice fósforo
salvo en escuelas de química
fábricas y polvorines
No aprueba esa palabra
un mínimo examen trasatlántico
y ya nadie recuerda la maldita (fórmula)
con que se suicidaban (antaño)
las mujeres pobres
Así que no se asombre
si ciertas historias terminan así
Aquí y allá un mismo inmolamiento
¿No lo reconoce?
Uno cambia de piel
bajo fuego cruzado
Pero ante cosas menores
no tenga remilgos
en poesía al menos
no
¿Cuánta gripe aviar se necesita
sabe usted
para aterrar el mundo?
Pedro Marqués de Armas nació en La Habana, en 1965. Fue miembro del grupo Diáspora(s). Publica, junto a Dolores Labarcena, la revista digital Potemkin Ediciones. Sus últimos libros de poemas publicados son Cabeças e outros poemas (Hedra, São Paulo, 2008) y Óbitos (Bokeh Press, Leiden, 2015). Este poema pertenece al segundo de estos libros.
Otros poemas suyos: Para que aprendas el valor de cada época, Relación de objetos, Ananké y Nociones de paternidad.