Ante los colectores de agujas
la ciudad se estiraba en el anochecer.
Mi necesidad de apagar algo
por las escaleras de incendio subía.
El viento trajo un aullido.
A bombear sangre anémica.
A enjaular lunas menguantes voy
en la colina del mono.
María Elena Hernández Caballero nació en La Habana, en 1967. Sus últimos libros de poesía publicados son Electroshock-Palabras (Argentina, 2001) y La rama se par-te (Ediciones Torremozas, Madrid, 2013).
Otros poemas suyos: El camino de Santiago, El condado de Harris, Mi cabeza reposa sobre la poesía completa de Anne Sexton y Cualquier piedra que levantes.