He escrito ciertas páginas, no he dormido. Un intermezzo y la piedra.
Tengo hambre. Nada puedo contra esas huellas en el centro del agua.
Acumulo ciertas telas debajo de mis ojos, a veces repito la palabra noche, pared y me levanto muerta.
He escrito pura mierda, pura estructura maloliente. Vivo en un país donde hay invierno y yo soñé alguna vez con los abrigos. Me levanto ilumino vocales en las pestañas del vecino. Qué asco, qué asco tanto sueño. El vecino sabe que mi cuerpo emerge, que dibujo esferas en la boca de mi amor. Es ajeno a nuestro vicio, sonríe y pide que abramos la puerta. Mi amor y yo calzamos espejuelos. Ella repite que el país es una roncha azul y me alimenta.
Escribo. Hay un modo de acomodarse la sustancia. Una cita apenas con la carne, un modus operandi que no cesa.
Vivo en un país, no miento. Escribo desde un rincón muy absoluto. El vecino toca su fantasma, es otro intento por desnudar la puerta.
He escrito ciertas páginas. Afuera otro país despierta, es la cara de mi amor.
El vecino grita. Debo seguir abriendo puertas. Una palabra apenas, pura sombra. No he dormido. Son las diez. Finale. Olga Kern sabe que no miento.
Lleny Díaz Valdivia nació en Placetas. Ha publicado el libro de poemas Sobre mi espalda desnuda otro silencio vive (Miami, 2012). Próximamente, una editorial madrileña publicará otro libro suyo: Placenta colectiva.
Otro poema suyo: Melancholia.