Funcionarios del estatal Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC) excluyeron el filme Quiero hacer una película, del cineasta Yimit Ramírez, de la sección Presentación Especial de la XVII Muestra Joven, por lo que consideraron un diálogo irrespetuoso sobre José Martí.
Según explicó Marta María Ramírez, involucrada en la realización de la película, lo que molestó a los censores habría sido un diálogo en el que uno de los personajes se declara no martiano y califica al prócer de "mojón" y "maricón".
"Hace dos semanas fuimos invitados por la Muestra Joven, Cuba a presentar un primer corte de trabajo en el Cine Chaplin, en la sesión de la tarde de su día inaugural (…)", informó Ramírez en un extenso post en su perfil de Facebook.
"Convenimos que no se trataría de una premier, sino de una presentación de proyecto con debate incluido. Nos retroalimentaríamos y dialogaríamos sobre métodos de trabajo y formas alternativas de financiamiento (…) Pero la Muestra no es autónoma. Así que el ICAIC tendría que revisar #QHUP (las iniciales del filme) para dar su visto bueno a nuestro trabajo", escribió.
Ramírez señaló que el funcionario Octavio Fraga Guerra le exigió una copia de la película en una memoria flash "para poder verla con el presidente del ICAIC", Roberto Smith de Castro.
"Me alarmé mucho. Había sido invitada solo a ponerles la película. De esa institución han salido a la calle y quioscos piratas cortes de trabajo que me he negado a ver en mi computadora. Pero no cerré el diálogo, a pesar de parecerme todo muy irrespetuoso", consideró.
Fraga Guerra respondió finalmente "que no se pondría (la película) porque no le había gustado una frase", sin que el presidente del ICAIC aún la hubiera visto.
Más adelante, la respuesta de Smith de Castro a los organizadores de la Muestra Joven fue: "Martí es sagrado". El presidente del ICAIC les dio la posibilidad de exhibir QHUP no en el Chaplin, sino en una recién inaugurada salita para 24 espectadores, que homenajea al cineasta fallecido Terence Piard.
El equipo de realización del filme censurado no fue convocado nuevamente por Smith de Castro.
"Pero no optamos por la independencia, con todo lo que eso implica, para al final ceder nuestra libertad. Así que nuestra decisión es no, mientras el ICAIC mantenga su postura de invalidarnos de sus circuitos oficiales", escribió Ramírez.
El equipo de la muestra de jóvenes realizadores, que se celebra hasta el próximo día 17 de marzo, lamentó la censura sufrida por la película de Yimit Ramírez.
"Vemos partir un filme arriesgado, plural, participativo como pocos en su concepción, en su gestión productiva y de comunicación. El fruto más largamente anhelado de un colega nuestro, de un 'hijo de la Muestra' que acaso pierda, con esta, la única posibilidad natural de mostrar su obra ante un público amplio en condiciones de 'visionaje' dignas, dentro del país", escribió también en Facebook.
"Creemos que la Muestra es un espacio para visibilizar sin obstáculos la obra de los jóvenes realizadores, así como para estimular el diálogo y la reflexión en torno a esta", concluyó.
Ramírez no ha sido el único en abordar de forma diferente la figura del Apóstol. El reconocido y veterano director Fernando Pérez, en El ojo del canario, dibujó un héroe atípico y no tuvo reparos en mostrar a un joven José Martí masturbándose.