Las deficiencias en el servicio de agua potable inquietan a la población cubana por temor a que, junto a las condiciones de insalubridad, aumenten también los brotes de enfermedades como el dengue.
En medio del silencio de la prensa, varios municipios de la provincia Santiago de Cuba están reportando nuevamente irregularidades en el abastecimiento de agua. La situación "es sumamente crítica e incide directamente en el brote de dengue", opinó Yenisey Jiménez, residente del municipio Palma Soriano.
"El ciclo de entrada del agua en estos repartos es sobre los 21 días, pero en los últimos meses hemos llegado hasta los 40 días sin la disponibilidad del servicio y, cuando llega, no tiene la fuerza suficiente para llenar los tanques o las cisternas", añadió Jiménez, quien aseguró además que esta situación se extiende a localidades de Contramaestre, San Luis y Julio A. Mella.
"Barrios como 13 de Marzo tienen las calles totalmente rotas por las reparaciones del Gobierno provincial desde hace más de un año, lo que impide el acceso de las pipas de agua que los pobladores alquilan ilegalmente, porque el Estado tampoco las resuelve alegando problemas con el combustible", apuntó.
Los precios del agua potable que los pobladores de estas localidades santiagueras pagan "por la izquierda" son de unos seis CUC por cada pipa y un CUC por cada tanque de 55 galones.
"En estas condiciones de insalubridad, por la ausencia de agua en largos períodos de tiempo, y con estos calores, aumentan los casos de dengue sin que el Gobierno se movilice en consecuencia", criticó Jiménez.
En recientes reportes oficiales, el doctor Francisco Durán, director nacional de Higiene y Epidemiología, dijo que "el incremento de casos de dengue en el continente americano mantiene en alerta a Cuba, donde se trabaja para controlar al vector y evitar la propagación del virus".
En la información, publicada por el sitio oficial Cubadebate el pasado 14 de agosto, Durán dijo que "en esta época del año las lluvias y las altas temperaturas propician la reproducción del insecto (el mosquito Aedes Aegypti) en ciclos cada vez más cortos", y que en el actual año ya se habían reportado "más de dos millones de enfermos de dengue en las Américas, donde el 70 por ciento de la población vive en condiciones propicias para la trasmisión de la enfermedad".
Sin embargo, el funcionario no mencionó el número de infestados en la Isla, ni el porciento de cubanos que habitan en las mismas condiciones que propician el brote y transmisión del dengue y otras enfermedades.
Desde Guantánamo el periodista de DIARIO DE CUBA Manuel Alejandro León apuntó que "el abastecimiento de agua potable es tarea pendiente de toda la vida esta provincia", donde a principios de agosto se anunció el brote de dengue mediante altavoces, una medida que los vecinos de esa ciudad consideraron "sin precedentes en las campañas de fumigación".
"La gente reclama y reclama pero no existe la posibilidad de que los guantanameros inicien una protesta como en La Habana, para lograr que de una vez y por todas el Gobierno preste interés y dé solución al problema del abastecimiento del agua potable", dijo León.
En las zonas marginales —que el Gobierno llama eufemísticamente "comunidades en desarrollo"—, "se agrava la situación porque ni siquiera tienen un ciclo regular de bombeo, y por ello dependen de las pipas", añadió el periodista.
"Sumado a todo eso, están las condiciones de la red hidráulica, que data de la neocolonia, al igual que la red sanitaria. En las casas no hay agua, pero en las calles se sale por chorros, algo que las autoridades solucionan con liguitas de cámara de carro", manifestó.
Fuentes en Holguín aseguraron que el bombeo de agua potable en toda la provincia ha experimentado un recorte de al menos un 25 porciento. En ese territorio existe también un brote de dengue y rumores no confirmados que hablan de un fallecido.