Trece de las 195 personas heridas durante el tornado que azotó La Habana hace casi una semana se mantenían este sábado en "estado grave", informó el ministro de Salud de Cuba, José Ángel Portal, reporta EFE.
En total permanecen ingresados 26 lesionados, "de los cuales 13 están en estado grave", indicó Portal en una reunión del Consejo de Ministros, según el diario oficial Granma.
Portal dijo que equipos de psicólogos y psiquiatras han reforzado la asistencia médica en las comunidades de Regla, Guanabacoa, Diez de Octubre, Habana del Este y San Miguel del Padrón, los municipios más afectados por tornado que la noche del domingo pasado tomó por sorpresa la ciudad.
El intenso tornado, el primero para la capital cubana en 80 años, golpeó con vientos superiores a los 300 kilómetros por hora y en poco más de 15 minutos derrumbó viviendas, arrancó techos, volcó coches y llenó las calles de escombros, en un caos que dejó cuatro muertos (según la versión oficial), 195 heridos y miles de damnificados.
Según los últimos datos oficiales, casi 5.000 personas permanecen evacuadas, de ellas 4.780 están alojados en casas de familiares y 164 se encuentran en centros estatales de acogida, colapsados por los damnificados de otras catástrofes naturales a los cuales el Gobierno no ha sido capaz de dar solución en los últimas décadas.
Del reporte inicial de 1.238 hogares dañados, el recuento de viviendas afectadas se ha elevado a más de 1.900.
A seis días del desastre, aún quedan comunidades sin servicio eléctrico, que ha sido restablecido en un 99%, según el ministro de Energía y Minas, Raúl García.
Por su parte, el titular de Comercio Exterior, Rodrigo Malmierca, anunció que varios países, empresas y organizaciones no gubernamentales han ofrecido donativos.
Venezuela ya envió 100 toneladas de materiales de construcción y maquinaria para apoyar la recuperación.
Miles de personas se han movilizado dentro y fuera de Cuba para asistir a los damnificados, un movimiento espontáneo que ha desbordado el ámbito digital y ha llegado a las calles de los distritos afectados con donativos de ropa, alimentos y medicinas, a pesar de trabas y algunos incidentes con las autoridades locales.
Muchos critican en redes sociales al Gobierno cubano, acostumbrado a centralizar la ayuda humanitaria tras un desastre natural, que ha pedido que las donaciones de particulares se lleven a centros estatales y, en el caso de aportes en metálico, se depositen en cuentas de banco cubanas.
En emergencias anteriores, el Gobierno ha sido acusado de vender los donativos.