En un artículo en el que pretende dar respuesta a las que califica de "insidias" sobre el salario, los títulos y las familias de los médicos cubanos, el sitio oficial Cubadebate dice que los "colaboradores en Brasil no reciben salarios" y los presenta como "becarios que prestan servicios primarios".
La nota, que vuelve a "alinear" al presidente electo de Brasil, Jair Bolsonaro, "con la Administración Trump y con sus amigos de la ultraderecha anticubana, encabezados por el senador Marco Rubio", recuerda la declaración del Gobierno el pasado miércoles.
La Habana anunció entonces que traerá de vuelta a todos los médicos que destinó a Brasil para participar en Más Médicos, un programa que, como reveló DIARIO DE CUBA en realidad fue propuesto por el Gobierno cubano y ya era negociado en secreto un año antes de que la entonces presidente de la República, Dilma Rousseff, lo presentara como respuesta a las protestas de junio de 2013.
"El MINSAP paga en Cuba el 100% de los salarios de los colaboradores. Aunque no están en Cuba preservan sus plazas y todas las garantías laborales y sociales de las que se son acreedores como trabajadores del sistema nacional de salud, y la protección y atenciones necesarias para sus familias", señala Cubadebate.
"Los colaboradores en Brasil no reciben salarios, porque no son empleados del sistema de salud, sino becarios que prestan servicios especializándose en servicios primarios de Brasil, que es lo permitido por la Ley Federal del Programa Más Médicos", dice.
El Gobierno cubano retiró su participación por la amenaza de presidente electo de Brasil, Jair Bolsonaro, de cambiar las reglas para exigirle a los cubanos que presenten exámenes para validar sus títulos en Brasil y que se les permita no solo llevar a sus familias sino recibir el 100% del salario.
Actualmente los médicos son obligados a dejar sus familias en Cuba y solo reciben el 25% de la remuneración, ya que Brasil le transfiere el restante 75% al Gobierno cubano a través de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), por lo que Bolsonaro considera que los médicos son sometidos a condiciones análogas a la esclavitud.
El medio estatal dice que "el Gobierno de Brasil no paga salarios a la OPS sino que paga por los servicios que la organización ha contratado al Ministerio de Salud Pública".
Declara que "los colaboradores que por elección personal deciden participar en el Programa Más Médicos bajo los auspicios de la OPS firman un contrato con el Ministerio de Salud Pública de Cuba por el cual deciden voluntariamente compartir ingresos para fortalecer el sistema de salud cubano".
Y aclara que los médicos en Brasil lo que reciben es "un estipendio para gastos personales y el Programa financia su alimentación, vivienda, transporte y seguro médico, lo que hace parte de sus ingresos".
¿Bien común?
Para el Cubadebate, los "colaboradores cubanos tienen vocación solidaria y prefieren compartir beneficios para el bien común de su país, en vez de defender una visión egoísta e individualista".
Así, el medio señala que su "contribución" ha permitido "financiar la reparación y rehabilitación de policlínicos, varios hospitales provinciales y los suministros de insumos, medicamentos y equipos para importantes programas como el de lucha contra el cáncer" y ejemplifica con algunas cifras.
Sobre el contacto de los médicos con sus familiares, el artículo defiende que el MINSAP "no prohíbe a los colaboradores relacionarse con sus familias y de hecho, la mayoría de ellos han recibido de visita a sus familiares en distintos momentos de su estancia en Brasil, además de que mantienen comunicación permanente con ellos, por diversas vías".
Dice que "las reglas del programa establecidas por el Gobierno de Brasil regulan el acceso y convivencia de personas ajenas a la colaboración con los médicos cooperantes" y que no "todos invitan a sus familiares por diferentes razones personales ni todos los familiares están en disposición de viajar".
Esta opinión contrasta con la de médicos que han decidido abandonar las misiones y han ofrecido sus testimonios a través de distintos canales e incluso han llegado a presentar demandas contra el Gobierno cubano.
Estas fugas son descritas por Cubadebate como "robo de cerebros" y las compara con el programa que por muchos años mantuvo el Gobierno de EEUU para dar refugio a los médicos que decidían romper sus contratos con La Habana.
No dice nada, sin embargo, de los ocho años sin entrar al país que impone el Gobierno a estas personas como castigo a su decisión personal.
El medio señala que si Bolsonaro "buscara de verdad el bien" de los médicos "se enfrentaría al Colegio Médico para permitir que sus propios compatriotas, graduados de medicina en Cuba, puedan aprobar el examen (de reválida) y acceder a puestos de trabajo en el sistema de salud brasileño".
"Sabemos bien que las insidiosas propuestas del nuevo presidente buscan desacreditar a los médicos, humillarlos, vejarlos en su dignidad, conducirlos a violar un contrato, a abandonar a sus compañeros y a la misión", concluye.
