"Lo estoy vendiendo todo para irme: la casa, el refrigerador y hasta la ropa", dice Yarian, un cuentapropista holguinero.
"Esto no da para más. Si tan siquiera mejorara lentamente, habría esperanza, pero qué va, esto es para atrás y para atrás. Cada vez que el Gobierno inventa una ley o hace algún reordenamiento es para joder al pueblo, no para ayudar. Yo me voy porque lo que viene ahora con los impuestos y lo de tener el dinero obligatoriamente en el banco es una trampa. El mejor negocio que se puede hacer en Cuba es emigrar", concluye.
En los últimos meses, la publicación de las nuevas normas organizativas e impositivas para el sector privado cubano parece estar dando un nuevo impulso al flujo migratorio.
Ya se notaba un restablecimiento de la migración hacia Latinoamérica desde el año pasado. La región se ha convertido en nuevo destino después de que Estados Unidos eliminara la política "pies secos / pies mojados", que permitía obtener residencia a los cubanos que llegaban a suelo estadounidense por mar o a través de la frontera con México.
Nayibis, una joven manicure madre de dos niños, el más pequeño con solo cuatro años de edad, se ha quedado sola porque su esposo se fue vía Guyana hace unos 15 días.
"Es un sacrificio grande y un riesgo tremendo también, pero hay que intentarlo, de lo contrario, no tendremos futuro, lo que es igual que estar muertos", dice.
"Este país es agobiante, ya no se puede inventar nada, la solución es irse. Uno trabaja y trabaja y no sale del mismo hueco", lamenta.
"Mi esposo ya anda por Perú y está contactando con un colombiano, que le recomendó un amigo que ya está en Estados Unidos, para pasar hasta Panamá. Se fueron cinco del barrio en grupo, pero se ha ido cantidad de gente en estos días. Tengo miedo pero, si Dios quiere, va a llegar bien y nuestra vida mejorará cuando podamos irnos todos", añade Nayibis.
Guyana no exige visa a los cubanos, que viajan con frecuencia como "mulas" de cuentapropistas, ya que las normas aduaneras cubanas encarecen demasiado las importaciones a partir del segundo viaje en un mismo año.
Ese país, al igual que Rusia, es frecuentemente usado también como puente para emigrar.
En los últimos dos años, tras la eliminación de la política de "pies secos / pies mojados", un gran número de cubanos se ha establecido en Chile, Uruguay y Perú. No obstante, llegar a Estados Unidos sigue siendo la meta de la mayoría.
Con regularidad, los guardacostas colombianos interceptan embarcaciones en el golfo de Darién con emigrantes cubanos a bordo, y se reportan asesinatos, robos y extorsiones por parte de los traficantes de personas. Las víctimas son igualmente cubanos.
"A los que no tenemos dinero para irnos atravesando esos países, ni nada que vender, lo que nos queda es 'el bombo' (sorteo de visas de diversidad de Estados Unidos). Dicen que son 50.000 visas para todos los países. Todo el mundo aquí está echando solicitudes para ver si tiene suerte", comenta Richard, un joven ingeniero que trabaja en la Unión Eléctrica.
"¿Quién no se quiere ir de este país? Si dieran un millón de visas para Cuba seguiría siendo poco".
Mientras el pueblo cubano, principalmente los jóvenes, huye en estampida de la pobreza y de las nuevas leyes que amenazan con un mayor control estatal, el Gobierno intenta culpar al embargo de Estados Unidos de todos sus problemas.
Actualmente busca nuevamente la aprobación en la ONU de una resolución contra la política estadounidense. La votación se llevará a cabo este 31 de octubre.
La diplomacia de la Isla intenta defenderse de las acusaciones sobre violaciones de derechos humanos argumentando que Estados Unidos tiene más problemas de ese tipo que Cuba. Sin embargo, son los cubanos quienes emigran hacia Estados Unidos y no al revés.