Un pequeño fuego que se generó de forma inesperada en un área de la Feria del Libro de La Habana en La Cabaña puso a correr a padres y niños que asistían al evento, según informó el sitio de noticias Cubanet.
El fuego se habría origina en la sala de juegos electrónicos. No hubo heridos, ni males mayores.
De acuerdo con el testimonio de Lissette Machín Díaz, presente en el lugar del siniestro, los padres de los menores que se encontraban en el lugar fueron quienes se dieron cuenta de lo que estaba sucediendo y dieron parte a las autoridades.
"Primero sentimos una peste a quemado y luego la sala se comenzó a llenar de un humo negro. Apenas podíamos respirar, entonces le avisamos a la persona que estaba a cargo y todos salimos corriendo de allí, pero todo sucedió muy rápido", dijo.
Según explicaron los bomberos, el incendiose produjo por una sobrecarga eléctrica en una de las oficinas que colinda con la sala de juegos electrónicos destinados a la recreación de los niños.
"Cuando las empleadas de la sala comenzaron a desconectar todos los equipos, nos dimos cuenta de que la cosa era en las oficinas que se comunican por una especie de túnel con la sala", detalló Machín.
Según Yeniséi Gómez, el fuego pudo ser "un gran incendio", pero los bomberos actuaron con rapidez.
"La realidad es que los bomberos llegaron muy rápido. Gracias a Dios, porque hay veces que se demoran cantidad, pero bueno, no fue este el caso; acabaron con el fuego y lo restablecieron todo muy rápido, y gracias a eso, los niños pudieron entrar a jugar los vídeo juegos nuevamente", aseguró.
Hace pocos días la prensa nacional dio cuenta de una falsa alarma de incendio provocada por un humo espeso en el restaurante Polinesio del Hotel Habana Libre. Los bomberos fueron movilizados por los vecinos.