¿Quién sucederá a Raúl Castro en la cabeza del Gobierno? Aunque la mayoría de los observadores da por sentado que será Miguel Díaz-Canel y el propio general ha asegurado que apuesta por que las viejas figuras del régimen dejen paso a otras más jóvenes, nadie sabe con certeza qué pasará el 19 de abril, cuando la Asamblea Nacional elija al Consejo de Estado y este al sustituto del dictador.
DIARIO DE CUBA presenta una lista de posibles candidatos. Algunos lo son por su posición actual dentro del régimen o el poder que acaparan, otros por su visibilidad o por la confianza que tiene en ellos la élite del castrismo.
Miguel Díaz-Canel Bermúdez, 57 años:
La mayoría de los pronósticos lo señalan como el sucesor de Raúl Castro. El kilometraje acumulado en los últimos meses en recorridos por el país y la amplia cobertura de la prensa oficial a sus actividades parecen respaldar la idea de que es el elegido por el general.
Muchos quisieron ver en el primer vicepresidente a un reformista, porque en su época como secretario del Partido en Villa Clara autorizó los espectáculos de travestis en El Mejunje y los festivales de rock, y porque pedaleaba por las calles de Santa Clara en su bicicleta. En los últimos meses, sin embargo, se ha encargado de dejar claro que su línea es la del castrismo ortodoxo.
Su ascenso a primera fila ha sido discreto, sin destellos que dejen entrever a un estadista. Es el dirigente nacido después de 1959 que más alto ha escalado dentro del régimen.
José Ramón Machado Ventura, 87 años:
Es uno de los históricos de línea dura del régimen. Desde que Raúl Castro asumió el mando formalmente ha sido su sombra; en una primera etapa como primer vicepresidente del Consejo de Estado y de Ministros, y luego como segundo secretario del Partido Comunista. En ese cargo debe seguir escoltando al general cuando este abandone la cabeza del Gobierno pero mantenga el liderazgo del PCC.
Alejandro Castro Espín, 52 años:
Coronel del Ministerio del Interior, es el único hijo varón de Raúl Castro y ha ganado visibilidad en los últimos años. Está a cargo del poderoso Consejo de Defensa y Seguridad Nacional, al cual se subordinan todas las direcciones de inteligencia y contrainteligencia cubanas. Encabezó las conversaciones secretas previas a las negociaciones para restablecer vínculos diplomáticos con Washington.
Ramiro Valdés Menéndez, 85 años:
Vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros y uno de los "comandantes de la Revolución". Fue ministro del Interior en los 60 y los 80. Se le atribuyen el diseño de los eficientes sistemas represivo y de inteligencia del régimen, y una asesoría encubierta en esos campos al Gobierno venezolano. Fue también ministro de la Informática y las Comunicaciones.
Salvador Valdés Mesa, 67 años:
Como vicepresidente del Consejo de Estado, sus "15 minutos de fama" llegaron durante la visita de Barack Obama a la Isla, cuando acompañó al presidente estadounidense a poner flores a José Martí en la Plaza de la Revolución. Fue secretario general de la Central de Trabajadores de Cuba, ministro de Trabajo y Seguridad Social y primer secretario del Partido en Camagüey.
Gladys María Bejerano Portela, 70 años:
La contralora y vicepresidenta del Consejo de Estado es una de las funcionarias más temidas del régimen. Algunos la han descrito como la "dama de hierro" cubana. Está al frente de la Contraloría General desde que fue creada en 2009 por Raúl Castro. El Gobierno presenta su trabajo como una de las "más complejas batallas institucionales y morales", en un país donde la corrupción invade todos los niveles.
Lázara Mercedes López Acea, 53 años:
La primera secretaria del Partido Comunista en La Habana ascendió rápidamente y con pocas paradas desde su empleo de ingeniera forestal en Aguada de Pasajeros hasta la vicepresidencia del Consejo de Estado. Fue primera secretaria del Partido en Cienfuegos.
Bruno Rodríguez Parrilla, 60 años:
El ministro de Relaciones Exteriores se ha apuntado varios triunfos diplomáticos en los últimos años; entre ellos, la reanudación de relaciones con Washington, la firma de un acuerdo político y de cooperación con la Unión Europea y un pacto con el Club de París sobre la deuda cubana. Dentro y fuera de la Isla es una de las caras más reconocibles del régimen. Fue dirigente estudiantil, director de Juventud Rebelde y representante permanente de La Habana ante la ONU.
Marino Murillo Jorge, 56 años:
La prensa lo bautizó como el "zar de las reformas", pues se le considera el principal arquitecto de los ajustes económicos del régimen en busca de su supervivencia. Fue ministro de Economía. Dejar ese puesto le ha restado visibilidad, pero sigue al frente de la Comisión Permanente para la Implementación y Desarrollo, encargada de elaborar las medidas que el Gobierno pone en marcha. Es vicepresidente del Consejo de Ministros y defiende la línea de austeridad y combate a la riqueza que ha impuesto el castrismo a los cubanos.
Esteban Lazo Hernández, 73 años:
El presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular es uno de los pocos afrocubanos que ha estado entre las figuras más visibles del régimen durante décadas, aunque siempre en segunda fila. Fue primer secretario del Partido en Matanzas, Santiago de Cuba y La Habana. Es vicepresidente del Consejo de Estado.
Leopoldo Cintra Frías, 76 años:
General de Cuerpo de Ejército, ministro de las Fuerzas Armadas y fundador del Partido Comunista es uno de los integrantes de la llamada "generación histórica" del régimen. Se ha paseado por varias de las ramas del Ejército y es considerado un hombre de la máxima confianza de Raúl Castro.
Julio César Gandarilla Bermejo:
Vicealmirante de la Marina de Guerra, es ministro del Interior desde el pasado año. Hasta entonces era una figura poco conocida, aunque fue jefe de la Contrainteligencia Militar. Desde su actual puesto, dirige la Policía y el aparato de Seguridad del Estado, entre otras áreas.