La crisis en la producción y abastecimiento de alimentos, agudizada tras el paso del huracán Irma por la Isla, ha afectado los planes de restaurantes y cafeterías del sector privado para crear ofertas de cara al fin de año.
Ni las tradicionales ferias agropecuarias, ni el surtido de productos alimenticios en la cadena de tiendas en divisas TRD, ni las rebajas de precios "hicieron acto de presencia al menos en La Habana", criticó Iván Darío, dueño de un restaurante en Diez de Octubre.
"Salí a recorrer los mercados en busca de turrones, pero solo encontré frustración y perdí combustible. Los turrones no duraron ni dos días, y los que quedaron estaban muy caros, casi tres CUC la unidad. A ese precio no da negocio".
Una de las demandas que el Gobierno ha sido incapaz de solucionar para beneficiar a los trabajadores del sector privado, es la creación de mercados mayoristas donde puedan adquirir insumos "a costo más competitivo, que nos dé margen de beneficio", añadió Iván Darío.
"La única opción que me quedaba para atraer clientela el fin de año era ofertar una mesa buffet con barra abierta", dijo Odalys Zamora, que regenta un restaurante en Centro Habana.
"Apenas tenemos variedad en la carta. Después de Irma la cosa se puso malísima para encontrar mariscos, pescados y carne rojas", se quejó.
El Gobierno anunció un discreto crecimiento del 1,6% del Producto Interno Bruto (PIB) este año. Pero quienes regentan negocios privados como restaurantes, cafeterías y hostales solo ven signos de decrecimiento.
"Al menos en términos de producción y abastecimiento de alimentos no se vio tal crecimiento. Muchos productos incluso tuvieron venta limitada a la población", objetó Yankiel Barrientos.
"El único producto que reapareció y se mantuvo estable fue la malta Bucanero, que es la más demandada por los cubanos. Sin embargo, la mayonesa que rebajaron de precio era porque tenía fecha de caducidad en febrero, y nadie en este giro se arriesga a una intoxicación masiva".
Aunque entre las cualidades de todo chef está la creatividad, es imposible idear un menú solamente con la imaginación, "se requiere tener un stock mínimo de alimentos", apuntó Regino Brooks, chef de un restaurante en Nuevo Vedado.
"Los agromercados están vacíos de viandas, hortalizas y verduras. Y cuando encuentras uno medianamente abastecido, la calidad es pésima, y el menú de la mayoría de los grandes paladares es caro. No puedes vender un plato de cinco CUC con una presentación mala".
'El fantasma de hacer más con menos'
En su discurso en la última sesión de la Asamblea Nacional del Poder Popular, Raúl Castro dijo que el país "no renunciará al despliegue y desarrollo de las formas de gestión no estatales en la economía". Sin embargo, los dueños de negocios privados se ven con frecuencia obligados a recurrir al mercado negro para mantener una oferta variada y atractiva de su menú.
"Somos revendedores de los productos del Estado y el desabastecimiento en los mercados estatales nos obliga al mercado negro para mantenernos a flote", analizó un cuentapropista que cada fin de semana consigue "productos del mar" por la zona de Batabanó y pidió mantenerse en el anonimato.
"Estamos obligados a trabajar bajo aquella máxima socialista de 'hacer más con menos', es decir, ofertar más con menos. Muchos de nosotros tuvimos la esperanza de que en esta última semana surtieran los mercados o que hicieran las ferias agropecuarias", afirmó por su parte Rey Frómeta. "La espera fue por gusto".
La necesidad de asegurar el respeto a la ley, afianzar los resultados positivos y enfrentar con firmeza las ilegalidades y violaciones a la política vigente, fueron los señalamientos de la Asamblea Nacional al sector privado.
"¿A qué se refieren con resultados positivos y firmeza ante las ilegalidades?", cuestionó Amanda Roque, administradora de una cafetería clase A en El Vedado.
"Ningún restaurante o cafetería en Cuba se sostiene comprando únicamente en los establecimientos del Estado y a sus precios. De ser así, venderíamos hamburguesas, pollo frito y perros calientes, que es lo único que ofertan y cuando lo ofertan".
Según los datos oficiales, el paso del huracán Irma por la Isla ocasionó 13.000 millones de dólares en pérdidas, pero "esas pérdidas no afectaron la producción de bebidas alcohólicas".
"Rones y cervezas es lo único que se exhibe en los estantes desde mucho antes del paso de Irma", dijo Juan Carlos, dueño de una pizzería en La Habana Vieja.
"La barra abierta fue la única alternativa que encontré para atraer clientela por fin de año, pues en la carta tenía lo mismo con lo mismo del resto del año".