El Gobierno elevó la cifra de participación en las "elecciones" municipales del pasado domingo de 85,94% a 89,02%, lo que presenta como una muestra del respaldo al sistema imperante en la Isla, según recogió una nota oficial de la Comisión Electoral Nacional (CEN) que publicó el periódico oficial Granma.
La actualización de los datos ocurre tras la realización de "la validación de la información proveniente de los colegios electorales" —precisó el CEN—en un proceso durante el cual "al mismo tiempo se compatibilizaron con el Registro de Electores las inclusiones y exclusiones de votantes que se produjeron el pasado 26 de noviembre".
"La compatibilización de las listas —en el primer caso de aquellos electores que de acuerdo con la Ley tenían derecho al voto y no aparecían en la lista del colegio correspondiente a su lugar de residencia y en el segundo los fallecidos— permite determinar quiénes de los electores incorporados el día de la votación constituyen un incremento real o no al registro, así como aquellos que ejercieron el voto por un colegio diferente al que se encontraban inscritos, al reconocer ante las autoridades electorales su derecho al sufragio por ese lugar", añadió la nota oficial.
Según el texto, "con la compatibilización se evita contar más de una vez al mismo elector, es decir, por el lugar en que se encontraba registrado o por el que al votar fue inscrito en el anexo a la lista".
La CEN señaló que "fue validada la elección de 11.415 delegados el pasado 26 de noviembre, por lo que se dispone de los resultados oficiales de esta primera vuelta, de las 12.515 circunscripciones aprobadas para el proceso".
"Asistieron a las urnas para elegir a los delegados a las asambleas municipales del Poder Popular 7.610.183 electores, lo que representa el 89,02% de participación.
En información anterior emitida el pasado lunes la CEN informó que habían acudido a los colegios 7.608.404 personas (54.882 electores más que los 7.553.000 de 2015), lo que significaba un 85,94% de participación.
Tras la actualización, el órgano a cargo del proceso "eleccionario" presentó los datos como "un respaldo al sistema político y al carácter democrático y participativo de la elección".
Según la declaración oficial, "la calidad de los sufragios está avalada por el 91,79% de las boletas válidas, cifra superior a 2015, cuando fue de 90,52%, mientras que las depositadas en blanco representan solo el 4,12% y las anuladas el 4,07, cifras inferiores a las del pasado proceso en 0,42 y 0,85%, respectivamente".
Alina Balseiro, presidente de la CEN, informó que 1.100 circunscripciones que representan el 8,78% irán a segunda vuelta el próximo domingo 3 de diciembre. Esta "elección" ocurrirá en 153 municipios, en los que se involucrarán 3.222 colegios electorales.
La funcionaria habló de "la calidad con la que se realizaron estos 'comicios' y la responsabilidad asumida por las autoridades electorales, así como por el resto de las instituciones, incluyendo las organizaciones de masas (controladas por el Gobierno) y demás involucrados", lo cual celebró como "expresión de un pueblo genuinamente democrático".
Varios grupos opositores que enviaron observadores a los colegios electorales el pasado domingo reportaron varias "incidencias": "al menos una decena de detenidos, operativos alrededor de las viviendas de activistas, el cerco policial de colegios electorales, impedir votar a opositores y otras violaciones de la Ley Electoral".
Los "comicios" organizados por el régimen siguen estando inclinados a su favor. El primer vicepresidente, Miguel Díaz-Canel, dijo abiertamente que su Gobierno estaba "dando todos los pasos para desacreditar" a los candidatos independientes porque si llegaban a las Asambleas Municipales "sería una manera de legitimar dentro de nuestra sociedad civil a la contrarrevolución".
Así, ninguno de estos candidatos habría podido alcanzar la nominación.
La Comisión de Candidaturas Nacional (CCN), como también las de niveles provincial y municipal, funcionan como filtros en estos "comicios" y garantizan al régimen que los delegados de las Asambleas Provinciales y los diputados de la Asamblea Nacional, que "elegirán" al Consejo de Estado y a su presidente, respondan a los intereses del Partido Comunista.
La transmisión del poder dentro de la elite del régimen parece estar en marcha. No está claro quién sucederá a Raúl Castro. Por ahora, la lógica —nada fiable en el caso del castrismo— apunta a Miguel Díaz-Canel.