El ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez Parrilla, y su homólogo norcoreano, Ri Yong-ho, abogaron este miércoles en La Habana "por impulsar vínculos y continuar el diálogo político provechoso" entre ambos gobiernos, según informó la oficial Agencia Cubana de Noticias (ACN).
Rodríguez Parrilla recibió al enviado del régimen de Pyongyang en la sede de la Cancillería, donde mostró su agradecimiento por la actual visita de la delegación. Dijo que es "muestra del desarrollo de los nexos históricos y de amistad existentes" entre los dos gobiernos.
El canciller cubano atribuyó "el satisfactorio estado de las relaciones bilaterales" a los "tradicionales principios de fraternidad establecidos" entre los difuntos Fidel Castro Ruz y Kim Il-sung.
Durante el encuentro, Rodríguez Parrilla abogó por la paz y la estabilidad en la península coreana y se refirió a "las tensiones por maniobras militares encabezadas allí por EEUU", sin hablar del programa nuclear y las pruebas de misiles promovidas por Kim Jong-un, rechazados a nivel internacional.
En tal sentido, criticó las "certificaciones y listados" que calificó de "unilaterales y arbitrarios" en los cuales Washington ha incluido a Corea del Norte, y que el canciller cubano consideró "sirven de base a la aplicación de medidas coercitivas contrarias al derecho internacional".
Rodríguez reiteró el discurso del régimen frente a toda tribuna "por el respeto a la soberanía e independencia de los Estados, la libre determinación de los pueblos, el no empleo ni la amenaza del uso de la fuerza, la solución pacífica de controversias, el derecho a establecer modelos propios en lo político, económico, social y cultural, y la no injerencia a los asuntos internos de los países".
Ri Yong-ho, por su parte, dijo sentirse "como en casa a pesar de la distancia geográfica" entre Cuba y su país, y confirmó que Pyonyang "concede gran relevancia a esta visita oficial, iniciada el lunes".
En opinión del enviado de Kim Jong-un, La Habana y Pyongyang están "construyendo el Socialismo bajo la presión y el bloqueo cruel de los imperialistas".
Consideró "importante el intercambio de opiniones" entre los dos regímenes "en busca de la edificación exitosa de ese modelo, pese a las dificultades".
El régimen de Kim ha tratado últimamente de estrechar sus lazos con el Gobierno de Raúl Castro con vistas a romper su aislamiento diplomático, ante el endurecimiento de las sanciones impuestas por la comunidad internacional.
El pasado mes de mayo, los medios norcoreanos afirmaron que el general había manifestado su solidaridad y apoyo a Pyongyang ante la crisis que vivía con Washington. Así le fue trasladado al líder sindical norcoreano Ju Yong-gil durante una visita a La Habana en el marco de una reunión de la Federación Sindical Mundial.
En enero, el vicepresidente cubano Salvador Valdés Mesa recibió al considerado número tres del régimen norcoreano, Choe Ryong-hae.
Los regímenes de Cuba y Corea del Norte han mantenido buenas y cercanas relaciones desde que entablaron lazos diplomáticos por primera vez en 1960.
El año pasado, con motivo de los actos funerarios tras la muerte del dictador Fidel Castro, Pyongyang envió a La Habana a Choe Ryong-hae.
El difunto visitó una vez Corea del Norte en 1986, en lo que supuso la primera y única ocasión en que se reunió con el fundador del país, Kim Il-sung, y su hijo y sucesor, Kim Jong-il, abuelo y padre, respectivamente, del actual líder norcoreano.