Las Tunas reporta una "alta incidencia de anemia" en los niños menores de cinco años, advirtió Misleydis Martínez Leal, coordinadora de Prevención para Cuba del Programa Mundial de Alimentos (PMA), citada por el Periódico 26.
Culpó a los padres de las "dificultades serias" de la detección de los casos por no facilitar las tomas de la hemoglobina a los seis, 23 y 60 meses de vida del niño.
"Actualmente no se estudian ni el 50% de los niños previstos y de ellos el 20% presentan la enfermedad. Hay que seguir con la labor de promoción para que los padres comprendan la necesidad de acudir al médico a realizarle este análisis a sus hijos", dijo. No especificó el número de casos detectados.
La anemia repercute en el desarrollo intelectual y psicomotor de los niños y propicia la aparición de enfermedades oportunistas como los catarros frecuentes. "Un niño obeso puede estar anémico porque su nutrición no es la adecuada", dijo la funcionaria.
"Casi siempre existe desconocimiento de los progenitores, algunos incorporan a la alimentación del bebé la leche de vaca que posee gran cantidad de grasas. Su consumo, a veces, ocasiona sangrados digestivos microscópicos que pueden conducir a una anemia", explicó.
Reiteró que el alimento ideal para el recién nacido es la leche materna, pues contiene proteínas, hormonas, grasas, vitaminas y sustancias defensivas. Asimismo, previene la desnutrición, agregó.
Después de los seis meses, los médicos orientan la incorporación de otros productos, según las necesidades individuales.
Las madres cubanas con problemas para amamantar a sus bebés se enfrentan a la falta de productos alimenticios en el mercado destinados a lactantes, o a precios inalcanzables para la mayoría de los bolsillos en las tiendas en divisas.
Martínez Leal recomendó para los niños una dieta balanceada con proteínas, carbohidratos y principalmente frutas y vegetales, algo también difícil de cumplimentar para los padres dada la escasez de alimentos en los mercados y los altos precios.
Como parte del proyecto del PMA en Cuba, 2.155 niños de entre 6 y 11 meses de edad reciben en Las Tunas el complemento Chispitas, fabricado en la Isla, rico en hierro, vitamina A, C, ácido fólico y zinc, pero que no sustituye la leche materna ni otros alimentos.