El cubano René Lima Marín, cuya condena por robo a mano armada fue desestimada por el gobernador de Colorado en un esfuerzo por detener su deportación a la Isla, tiene una segunda oportunidad para discutir por qué debería permitírsele permanecer en EEUU, dijo el martes su equipo legal, citado por AP.
Un juez de inmigración en Denver anuló una orden de deportación de Lima Marín el pasado 31 de julio, por lo que el cubano comenzará a discutir su caso nuevamente en una corte de Inmigración en Aurora.
Lima Marín, de 38 años, atrajo la atención nacional después de que él y un cómplice fueron sentenciados a 98 años de prisión en 2000 por robar dos tiendas de video.
El cubano fue liberado por error de la prisión estatal de Colorado en 2008, pero nunca reportó la equivocación a las autoridades. Su cómplice, Michael Clifton, permanece en prisión.
El hombre se casó, tuvo un hijo y consiguió un trabajo estable antes de que las autoridades descubrieran el error en 2014 y lo devolvieran a la cárcel.
En mayo, un juez ordenó su liberación, diciendo que era draconiano mantenerlo tras las rejas, pero las autoridades de Inmigración lo detuvieron en su lugar, citando una orden de deportación de 2000.
Días después, el gobernador John Hickenlooper, un demócrata, perdonó a Lima Marín con la esperanza de detener su deportación. Los funcionarios de Inmigración y Aduanas dijeron que eso no tenía efecto en la orden final de expulsión de un juez de Inmigración.
Hans Meyer, abogado del cubano, luchó contra la orden, y su compañía anunció este martes que la orden fue desestimada el 31 de julio por la juez de Inmigración Melanie Corrin en Denver.
El caso del cubano podría tardar semanas o meses para obtener un veredicto. "Vamos a pelear, y estamos listos para ello", dijeron los abogados.
Lima Marín llegó a EEUU cuando el Mariel. Tuvo residencia legal hasta que fue revocada tras su condena penal.
Decenas de miles de cubanos que viven en EEUU se adaptan a una nueva realidad y algunos de ellos enfrentan los mismos temores de deportación que otros inmigrantes, tras décadas de haber gozado de un estatus que los protegía.
Más de 36.000 cubanos en EEUU tienen órdenes de deportación. De ellos, 29.000 son criminales condenados y 7.000 han transgredido las leyes de inmigración, de acuerdo con el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE).
El acercamiento entre Washington y La Habana iniciado en 2014 trajo, entre otros, la posibilidad de que la lsla aceptara más deportados.
En 1984, ambos países acordaron una lista para repatriar a 2.746 presuntos criminales cubanos. Con el fin de la política de "pies secos/ pies mojados" en enero, los gobiernos de Cuba y EEUU pactaron también que agregarían otros cubanos con órdenes de deportación que llegaron en 1980. Del total de la lista, unos 2.030 han sido repatriados, 256 han muerto y el resto estarían enfermo o con edad avanzada como para ser deportado.