Pastores del Ministerio Senda de Justicia en Santiago de Cuba iniciaron un proyecto que busca ayudar a vagabundos y otros marginados, informó a DIARIO DE CUBA el promotor de la idea, Alain Toledano Valiente.
"Surge por la necesidad que hay en la sociedad", dijo. "Las calles están prácticamente inundándose de jóvenes y de personas de la tercera edad. Ya no es como antes, que eran solamente los ancianos; vemos jóvenes en las calles, vagando, hambrientos, necesitados". Por eso "estamos activando este programa, poniendo nuestro granito de arena en este país, en esta sociedad, y ayudando a gente que no tiene con qué alimentarse", explicó.
Senda de Justicia es una iglesia que radica en el Reparto Abel Santa María, de Santiago de Cuba, y fue fundada en 1999. Como otros pastores evangélicos que mantienen una postura crítica hacia el Gobierno y se niegan a subordinarse al control del Partido Comunista, su líder ha sufrido junto a su familia y sus fieles la represión de las autoridades.
Fuerzas del Gobierno han destruido en varias ocasiones el templo de Toledano Valiente. También han dañado su casa.
"Hemos visto las necesidades profundas de nuestros niños, principalmente los que vienen a la iglesia; niños sin zapatos, sin ropas, niños que jamás en la vida han tenido el privilegio de tener un juguete en sus manos (…) y activamos un subprograma de apoyo para traer una sonrisa al rostro de cada niño", afirmó el pastor.
"Estamos apoyándoles no solo trayéndole ropas, sino comprándoles camas, colchones, para sacarle de sus casas esa pena tan triste de estar durmiendo en el piso", agregó.
La iniciativa ha sido bien acogida por los destinatarios. "Todo el mundo ha tenido con nosotros un trato divino, nada que ver con el que recibimos en lugares del Estado", dijo Aida Agustina, quien ha estado en establecimientos de la Seguridad Social del Gobierno. "En comparación con la que sirven en los comedores estatales, la comida de los pastores la veo muy superior", comentó.
"Me siento muy bien con esta ayuda y doy gracias a los pastores (…) Si el Gobierno no quiere que los pastores hagan este tipo de proyectos, que lo hagan ellos; pero muchas veces el Gobierno se olvida de nosotros, apoya lo mal hecho y dice más de lo que hace", declaró Víctor Manuel Rodríguez Ponce, otro beneficiado por el proyecto.
"Me atienden y nos tratan con cariño a todos los que estamos aquí. Yo no estaría de acuerdo con que el Gobierno lo quite", afirmó por su parte Ernesto Ferrer Galindo.
Por estas acciones, "el régimen siempre trata de perseguirnos, de acercarse a los beneficiados e instigar al pueblo diciendo que la iglesia no tiene el derecho de inmiscuirse en los asuntos de la sociedad. Hemos sido perseguidos, vituperados […] pero gracias a Dios ellos confían en que nosotros no los abandonaremos, eso no va a suceder", aseguró Manuel, uno de los participantes en el proyecto.
El pastor Toledano Valiente consideró que los programas creados por el Gobierno "no han sido efectivos".
"Si lo hubieran sido, hoy nosotros no estuviéramos haciendo lo que estamos haciendo, no hubiera la necesidad social que hay", argumentó.
"Yo creo que los intereses son completamente diferentes. El nuestro es ayudar a la sociedad, es apoyarla, es acabar con la tristeza y con la necesidad, y haciendo eso estamos cumpliendo con uno de los mandamientos del Señor, que dice 'amarás al prójimo como a ti mismo'", afirmó. "Este no es el interés del Gobierno; el suyo es dar algo para mantenerse en el poder. Nosotros solo queremos ayudar a la sociedad, ahí radica la diferencia entre la política de populismo que se aplica en este país y otros de Latinoamérica, y la nuestra, a nosotros solo nos complace servir ante los ojos de Dios", defendió.
Toledano Valiente dijo que el proyecto recibe ayuda de otras iglesias y organismos.
El régimen ha reprimido otras iniciativas de la sociedad civil que ponen en evidencia su ineficacia a la hora de proteger a los desamparados, como el Proyecto Tondique, en Matanzas.