Después cinco años de suspensión, el Gobierno reabrió este mes en Varadero la posibilidad de solicitar licencias para rentar habitaciones a extranjeros, confirmaron arrendadores privados y una fuente de la Oficina Nacional de Administración Tributaria (ONAT).
Las autoridades exigen a los arrendadores algunas condiciones básicas: ser propietario del inmueble, que el titular demuestre que sus ingresos solo provendrán de ese negocio y que la casa esté en buen estado constructivo.
Una empleada de la ONAT en Varadero confirmó vía telefónica que el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social aprobó el otorgamiento de licencias en el balneario y que los privados pudieron comenzar a presentar solicitudes el pasado 1 de mayo.
Según un residente en el polo turístico interesado en arrendar, los privados que ya han presentado sus papeles deberán esperar alrededor de un mes para que las autoridades decidan si los autorizan.
"Sin explicación alguna habían cerrado en 2012 esa posibilidad. Aquí en Varadero apenas existen cuentapropistas pues no permiten tener paladares particulares ni otros tipos de negocios. Esta zona está considerada 'territorio especial' y es atendida directamente por el Consejo de Estado", dijo el vecino bajo condición de anonimato.
"Aquí no se mueve una hoja sin que las autoridades se enteren; si te cogen en cualquier negocio considerado ilegal enseguida pueden decomisarte tu casa y nadie está dispuesto a coger ese riesgo", afirmó Patricia Díaz, otra de las personas que ahora opta por la licencia.
La empleada de la ONAT precisó que en otras localidades cercanas, como Santa Marta y Boca de Camarioca, sí era posible arrendar.
"El paulatino incremento de la llegada de turistas a Cuba los ha obligado a tomar esa medida. Además, muchos turistas prefieren estar en una casa, donde reciben mejor atención y ven cómo viven los cubanos realmente", señala Atencio Miranda, un hombre que ha vivido la mayor parte de su vida en Varadero.
El balneario, ubicado en el municipio matancero de Cárdenas, es descrito como el principal polo turístico de la Isla. La mayoría de los hoteles que funcionan en él son propiedad mixta la corporación militar GAESA con grupos foráneos fundamentalmente españolas, como Meliá e Iberostar.
En febrero pasado, el Gobierno avisó que pondría coto al trabajo privado en Varadero, aunque se emitirían nuevas licencias en determinadas actividades.
Las autoridades justificaron entonces que la decisión buscaba "mejorar la imagen de Varadero" por su "alto interés para el turismo".