Moscú comenzó a enviar por primera vez en este siglo grandes cantidades de petróleo a Cuba, dijeron fuentes a Reuters, en medios de una disminución de los suministros a la Isla por parte de Venezuela.
Un petrolero ruso con 249.000 barriles de crudo y productos refinados llegará a Cuba el 10 de mayo, aseguraron a Reuters fuentes navieras y otras, rememorando tiempos cuando la Unión Soviética cubrió las necesidades energéticas de la Isla.
Aparentemente más tanques de crudo seguirán llegando.
La estatal rusa Rosneft anunció el miércoles la firma de un acuerdo con la también estatal Cubametales para suministrar 250.000 toneladas de petróleo y diésel. No ofreció más detalles.
La noticia seguramente alertará a Washington debido a que se mantienen las tensas relaciones con Moscú, pese a la promesa de campaña del presidente Donald Trump de mejorarlas.
La firma rusa se ha convertido en una preocupación para Estados Unidos. La petrolera estatal venezolana PDVSA utilizó el año pasado 49,9% de sus acciones en su filial estadounidense, Citgo, como garantía para préstamos de Rosneft.
Según Jorge Piñón, un experto de la industria petrolera de la Universidad de Texas, en Austin, el acuerdo de Cuba equivale a alrededor de 1.865.000 barriles de crudo valorados en 105 millones de dólares. En comparación, Rusia informó el envío de productos a Cuba entre 2010 y 2015 por 11,3 millones de dólares.
La Isla consume 22.000 barriles diarios de diésel y 140.000 barriles diarios de productos refinados del petróleo.
El país enfrentó largos apagones y escasez de combustible después del colapso de la Unión Soviética, una crisis que el fallecido presidente izquierdista venezolano Hugo Chávez resolvió rápidamente años después.
Desde entonces Cuba se ha apoyado en Venezuela, un miembro de la OPEC, para cubrir aproximadamente el 70% de sus necesidades de combustible, incluyendo el petróleo para refinar y las reexportaciones. Pero los envíos subvencionados desde Caracas han caído un 40% desde 2014.
El racionamiento de electricidad y combustible a empresas estatales cubanas comenzó el pasado año y más recientemente ha habido escasez de gasolina.
En pasadas semanas el Gobierno tomó medidas como la orden de limitar la venta de gasolina especial o de alto octanaje a los vehículos del Turismo y personal diplomático —puesta en práctica desde el pasado 1 de abril.
Las restricciones en la venta de gasolina especial se produjeron cuando el país busca un suministro alternativo de combustible ante la reducción del crudo subsidiado que recibe desde 2003 de Venezuela, que llegó a alcanzar los 100.000 barriles diarios y que, debido a la crisis en ese país, se redujo a unos 55.000 barriles.