"La venta de casas va a continuar porque en este país la situación no mejora… la caña se pondrá a tres trozos y el cubano, asfixiado, emigrará así sea para el Himalaya", afirmó María Elena, de Santo Suárez y con más de 10 años de experiencia en la compraventa de inmuebles.
"Tengo clientes que no se han desanimado con la derogación de la ley [pies secos/pies mojados] y planean, con la plata de la venta, sacar pasaje hacia Rusia, que no pide visado, para desde ahí intentar cruzar a la Unión Europea con destino a España".
El pasado 12 de enero, la Administración de Barack Obama, tras un acuerdo con el Gobierno de Raúl Castro, puso fin a la política "pies secos/pies mojados".
Ambas partes ratificaron "la decisión (…) de impedir las salidas ilegales vía marítima".
El acuerdo bilateral también implica la deportación "de los cubanos que intenten ingresar a los Estados Unidos ilegalmente".
"Es cierto que la mayoría de los cubanos que emigran tienen como objetivo radicarse en Estados Unidos, pero simplificar el hecho a que la derogación de la ley detendrá la estampida migratoria es no comprender la realidad que vivimos dentro de Cuba", opinó Luis Carlos Navas, ingeniero civil que recientemente vendió su propiedad.
"Cuando el Gobierno de Raúl quitó el permiso de salida con la reforma migratoria y autorizó la compraventa de viviendas entre particulares, el mundo entero pudo ver que los cubanos ya no aguantábamos vivir en Cuba. La estampida fue de vértigo. La gente empezó no solo a vender sus casas, sino cuanta cosa de valor pudiera proporcionarle un billete de avión", recordó.
Navas piensa como alternativa viajar hacia Trinidad y Tobago y esperar allí con la esperanza de "que [Donald] Trump revierta el acuerdo". De lo contrario, probará suerte en España, "pero en Cuba no me quedo un minuto más".
Para Laura Natividad la derogación de la ley "pies secos/pies mojados" representó "un trauma y bastante rabia contra Obama".
"Había concluido la venta de mi casa el día anterior y tenía concertada una cita en la Embajada de Panamá que otorga visas por tres años con entradas múltiples, pero en cada viaje solo puedes permanecer 30 días. Mi propósito era salir de allí hacia Estados Unidos, que me había negado la visa en La Habana. Estoy a la espera del visado panameño, porque me largo de Cuba a como dé lugar".
José Víctor es "gestor de compraventa de inmuebles" y radica en el Paseo del Prado "desde los tiempos en que todo este asunto de vender y comprar casas era ilegal y los corredores teníamos que hacer piruetas" para no ser detectados por la Policía.
"Desde que legalizaron este giro he cerrado 100 veces más ventas de casas que hace 20 años. En la mayoría de las ocasiones eran personas que habían decido emigrar a otro país. Con esta nueva situación se cierra una vía de escape que había sido natural para los cubanos, pero no va a cambiar en nada que la avalancha continúe… solo que el destino no serán los Estados Unidos", declaró.
"Para atrás ni para coger impulso", dijo Zule Izquierdo, una joven de 38 años que, a pesar de la derogación de la "pies secos/pies mojados", decidió poner en venta su apartamento del Reparto Martí con los corredores de Prado.
"Insistiré nuevamente con Finlandia, que el año pasado me negó el visado al igual que Estados Unidos. A muchos que vendieron sus casas, con planes de brincar para el 'yuma', los veo alicaídos. El tema es salir de esta olla de presión, que se pondrá peor cuando empiecen a llegar los deportados, no importa si es vía Rusia, Bahamas o Serbia".
Gestores de la inmobiliaria privada La Isla declararon que "el pacto del 12 de enero no ha cambiado, ni cambiará los planes" de quienes quieren vender sus propiedades con el fin de migrar hacia otros países.
"Aquí siguen llegando personas que buscan más seguridad en tramitar a través de nuestras empresas y que ya en confianza nos confiesan que quieren irse a vivir a otro país. Un detalle curioso es que más de la mitad de ellos nunca tuvieron como destino los Estados Unidos, sino la zona europea".
Otro de los gestores dijo que llamó a "un colega" de otra empresa, "preocupado porque el negocio pudiera experimentar una baja". Sin embargo, añadió, el colega le respondió: "tranquilo, Estados Unidos no es el único país al que los cubanos quieren irse".