El historiador de La Habana, Eusebio Leal, se quejo de la apropiación de los símbolos nacionales, como la bandera, para usos comerciales, y pidió detener esa práctica, informa la web oficial Cubadebate.
"No estoy de acuerdo con eso", dijo Leal durante una entrevista con la periodista oficialista Magda Resik en el Salón de Mayo del Pabellón Cuba. "No estoy de acuerdo con que la bandera cubana sea un delantal", añadió
"Cómo voy a pensar que es la misma bandera que reverencian los niños en las escuelas, que cubre el féretro de un intelectual o un soldado, que el deportista levanta cuando alcanza para su patria y su familia un gran logro. No podemos imitar lo que está mal hecho (…) Por esa vulgarización comienza un deterioro de los valores", aleccionó Leal y, según el reporte, quienes acudieron a presenciar la entrevista le respondieron con aplausos.
En los últimos meses intelectuales cubanos se han quejado de mercantilización de los símbolos patrios.
Leal reapareció en público tras una ausencia de varios meses por problemas de salud que no reveló. Recibió como bienvenida preguntas adulonas y comentarios empalagosos de Resik.
El funcionario, cuya oficina ha llevado a cabo la rehabilitación de plazas y edificios en el Casco Histórico, pero también ha promovido la mudanza forzosa de vecinos para luego destinar los inmuebles a fines lucrativos, se quejó de la ocupación de espacios por parte de privados.
"No tenemos idea del valor del suelo. Vivimos en una isla que es pequeña", dijo. "Pero también el espacio que ocupamos es fundamental. Por eso luchamos tanto por defender las cosas, de ahí que es tan importante detener la expropiación sistemática de las personas, sin que por eso me proponga coartar la libertad de los cubanos", añadió.
El historiador mencionó la restaurada Plaza Vieja. Hoy el espacio acoge, en los anteriores hogares de los vecinos, solo negocios y emprendimientos particulares. Sobre esto, Leal dijo que está bien que las personas, ante una necesidad, tomen decisiones, pero de no detenerse esa práctica, ante el "dinero brutal" que la respalda, "lo perderíamos todo", se quejó.