Durante los últimos cinco años la producción de alimentos ha mantenido un ritmo bajo de crecimiento, lo cual ha provocado que la importación anual de alimentos alcance como promedio los 2.000 millones de dólares, de los que se pudieran producir en Cuba aproximadamente la mitad, reconoció el sábado el general Raúl Castro al leer el informe central del VII Congreso del Partido Comunista.
No obstante, en el análisis de las comisiones sobre los lineamientos en política agroindustrial no se profundizó en el tema de la producción nacional.
Fueron los altos precios de comercialización y su repercusión en las figuras del trabajo por cuenta propia aprobadas anteriormente (vendedores mayoristas y minoristas de productos agropecuarios), en los que se concentraron las intervenciones, publica el diario oficial Granma.
Según Yunier González, delegado de Artemisa, los vendedores mayoristas no deben continuar, "pues se han convertido fundamentalmente en revendedores". Dijo que en su momento fueron necesarios, cuando en el territorio habanero desapareció la empresa de Acopio.
Consideró que ya no cumplen su función porque "el Estado está contratando hasta el 80 % de las producciones y con precios muy ventajosos para los productores".
En cambio cree que sí son necesarios los vendedores minoristas (los carretilleros). "Están más cerca de la población, pero a los otros no les duele lo que suceda con los precios", dijo.
Otro delegado, también de Artemisa, apoyó el planteamiento y agregó que "en los campos de su provincia ha aparecido gente que roba los productos para venderles a estos comercializadores mayoristas, pues pagan en efectivo". Según el militante, "esto es signo de que esta figura del trabajo por cuenta propia ha dejado de cumplir una función positiva y debe rectificarse".
El ministro de Economía y Planificación, Marino Murillo, dijo con respecto a los vendedores mayoristas que "de haber obtenido buenos resultados, la idea se habría generalizado, pero por lo sucedido hasta ahora se había decidido no extenderla".
Según Granma se dijo que en el país existen más de 200 comercializadores mayoristas aprobados pero que ilegalmente ejercen otros. La miembro del Buró Político del Partido y primera secretaria en La Habana, Mercedes López Acea, anunció que se enfrentarían "con fuerza las actividades ilícitas, no solo en esta actividad del trabajo por cuenta propia".
Juan Rodríguez, delegado de Holguín, señaló que están por solucionar los problemas del impago en algunos lugares, pero que todo puede funcionar bien. "La cooperativa es quien tiene que comercializar los productos —subrayó—, el mecanismo de comercialización debe ser entre Acopio y las formas productivas, porque todo lo que se introduce en esa relación resulta en precios altos para el pueblo".
La comisión de agricultura finalmente dejó recogido en el informe que "el experimento de comercialización", en referencia a los vendedores mayoristas, "no salió bien".