El Ministerio de Salud Pública (MINSAP) prometió este jueves una "ubicación laboral en similares condiciones a las que tenían" a los profesionales de la salud que han abandonado la Isla y quieran regresar.
"Los profesionales de la salud que bajo los términos de la actualización de la política migratoria han salido del país, ya sea por un interés económico, familiar o de índole profesional, incluyendo aquellos víctimas de las engañosas prácticas del vulgar robo de cerebros, tienen la oportunidad, si así lo desean, de reincorporarse a nuestro Sistema Nacional de Salud", dijo el MINSAP casi al final de una larga nota publicada en el diario oficial Granma.
La concesión indica que la fuga de trabajadores de la salud se ha convertido en un serio problema para el Gobierno. Los médicos han estado en el pasado entre los profesionales más represaliados por dejar la Isla, incluso si lo hacían de forma legal.
El MINSAP dedica buena parte de su nota a repetir el discurso oficial sobre la formación ética de los médicos cubanos y su humanismo, a enumerar misiones "desinteresadas" en el extranjero y a asegurar que puede "garantizar" la salud del pueblo "y al mismo tiempo continuar la colaboración internacional".
Afirma que el país ha llegado a tener 85.000 médicos, lo que representa 7,7 por cada mil habitantes, y que, de ellos, 25.000 se encuentran cumpliendo misión en el extranjero.
Añade que "la calidad científico técnica" del personal de salud cubano y "su formación, valores humanos", han determinado "que sean demandados en numerosos lugares del mundo".
"En este sentido, existen convenios de colaboración Gobierno a Gobierno, en los que se establece determinada compensación en beneficio mutuo", dice. No obstante, señala que continúa la "ayuda desinteresada y gratuita a las naciones que lo requieran".
La venta de servicios profesionales, principalmente de la salud, es actualmente la principal fuente de ingresos del Gobierno. La nota del MINSAP no menciona ese dato. Tampoco explica la forma en que son contratados los trabajadores cubanos enviados a misiones en el exterior. En muchos casos los médicos reciben solo el 25% de lo que pagan por ellos los gobiernos de los países de destino.
El ministerio se queja en su nota, sin embargo, de lo que considera "campañas difamatorias" contra los galenos cubanos y de "acciones contra la ética por parte de los gremios y colegios médicos, que ven en los profesionales cubanos una amenaza al lucrativo negocio que es la medicina capitalista".
El "notable prestigio" de la salud pública cubana "ha suscitado el interés de clínicas por contratar profesionales cubanos para el ejercicio privado de la medicina. Ello viene ocurriendo incluso en países amigos, aun cuando sus gobiernos no favorecen ni comparten tales procedimientos", critica.
Señala a Washington como "uno de los principales artífices del robo de talentos", y lo culpa de los obstáculos que durante décadas puso el régimen a la salida del país de profesionales de la salud.
La política estadounidense "nos obligó a adoptar controles y regulaciones migratorias para contrarrestar" la fuga de médicos, dice.
Menciona el Cuban Medical Professional Parole, programa de refugio del Gobierno estadounidense para médicos cubanos que se fugan de misiones en el exterior, al que se han acogido miles de profesionales, la mayoría enviados a Venezuela.
El MINSAP dice que "agentes y activistas" en los lugares donde laboran los médicos "presionan y ofertan facilidades de todo tipo a quienes deserten y emigren al territorio norteamericano con la promesa de un mejor futuro profesional, que en realidad solo es posible alcanzar por una exigua minoría".
La nota oficial no habla de los exiguos salarios que reciben los profesionales de la salud en la Isla. Tras una subida aprobada en marzo de 2014, un médicos cubano especialista de segundo grado gana el equivalente a 66 dólares mensuales. Para muchos, las misiones en el exterior son una opción para mejorar sus condiciones de vida, aunque ello implique trabajar en lugares peligrosos.
El MINSAP asegura en su nota que "existe la voluntad de favorecer todas las vías posibles para mejorar las condiciones de vida y trabajo" de los médicos.
Dice que "se avanza" en un mayor acceso a las tecnologías de la información, becas en el extranjero para aprender nuevas técnicas, una ampliación de la modalidad de misiones de colaboración por períodos cortos, y la participación en congresos y eventos nacionales e internacionales, entre otros beneficios.