El régimen de La Habana edifica el denominado "Proyecto Granma", una operación inmobiliaria con "cientos de confortables apartamentos en un complejo cercado que tendrá sus propios cines y escuelas", pero solo para militares, reporta The New York Times.
El "Proyecto Granma" y otras "ciudades militares" en todo el país son "edificaciones de color caribeño, destinadas exclusivamente a los más ardientes defensores de la revolución cubana, de 1959: familias vinculadas a los militares y al Ministerio del Interior".
Según el diario norteamericano, los flamantes apartamentos, con balcón y aire acondicionado, "constituyen el regalo más visible del gobierno para sus funcionarios de rango medio".
"La vivienda es apenas un ejemplo del expansivo rol de los militares en los planes de Castro para Cuba e ilustra un conflicto central de sus intentos de abrir la economía sin desmantelar la estructura de poder que él y sus camaradas construyeron durante décadas", precisa el periódico.
"Raúl sabe que la respuesta militar no es la respuesta, pero también sabe que por el momento necesita absolutamente de la lealtad de los militares", dijo Hal Klepak, un académico canadiense que estudia a las fuerzas armadas de Cuba. "Son los únicos que seguirán a su lado, tanto si la reforma tiene éxito como si falla".
Muestra de favoritismo
A los ojos de muchos, las nuevas viviendas, una necesidad que escasea enormemente en toda la Isla, son una nueva muestra de favoritismo. Según las cifras del gobierno, el presupuesto militar para la construcción se duplicó desde 2010.
The New York Times dice que el equivalente del "Proyecto Granma" en Santiago de Cuba "es blanco de fuertes críticas de los cubanos que viven en hogares devastados por el huracán Sandy".
El complejo de La Habana tendrá un campo de béisbol, alumbrado público, parqueos y una cerca perimetral.
Frente a un edificio que alojará un cine, un mercado y un centro de salud, uno de los ingenieros dijo que algún día el proyecto será el hogar de miles de personas. Según un guardia de seguridad citado por el diario, la mayoría de los pintores del complejo son presidiarios.