El intelectual y político cubano José Ignacio Rasco falleció este sábado por la mañana en su hogar en Miami a la edad de 88 años, informa el diario miamense El Nuevo Herald.
Rasco murió tras complicaciones ocasionadas por el derrame cerebral que sufrió recientemente, y que lo mantuvo con la salud debilitada durante esta semana, según una nota del sacerdote Pedro A. Suarez, director del Colegio Jesuita Belén de Miami, centro en el cual el intelectual cubano ejerció como docente, reportó EFE.
Rasco, que fundó en 1959 el Partido Demócrata Cristiano en Cuba y en la actualidad era presidente de honor de dicho partido en el exilio, falleció mientras descansaba, al lado de su hijo, hija y otros miembros de la familia.
Graduado del colegio Belén, en la capital cubana, José Ignacio Rasco realizó estudios universitarios de Derecho y Filosofía y Letras, en la Universidad de la Habana.
En la Isla fundó junto a su hermano un bufete de abogados y escribió para el periódico Información.
Tras exiliarse en 1960 trabajó como economista en el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), donde fue electo y reelecto presidente de la Asociación de Empleados.
Como educador, empezó su carrera en el Colegio Belén de la Habana. En Miami, desde el año 1974 se encargó del Departamento de Desarrollo de este mismo centro de estudios, en el que se mantuvo muchos años.
Fue una figura destacada dentro de la vida cultural de Miami, debido a su papel como fundador del Instituto Jacques Maritain, una organización dedicada al estudio de la actualidad bajo el prisma de ese filósofo francés.
Rasco continuó además en Radio Martí, en Miami, el programa radial La Universidad del Aire, fundado en Cuba por Jorge Mañach. También presidió la Editorial Cubana Luis Botifoll.
Autor de numerosos ensayos, su más reciente trabajo editorial, Acuerdos, desacuerdos y recuerdos, abarca sus inicios en la escena política, así como una extensa semblanza de Fidel Castro, de quien fue compañero de curso en Belén y en la Universidad de La Habana.
Su ensayo Integración cultural de América Latina fue premiado por el Banco Interamericano de Desarrollo. Merecedor de diversos premios periodísticos, como el Sergio Carbó y el José Ignacio Pepín Rivero, Rasco fue también galardonado con la Orden Isabel la Católica por su defensa del idioma español, según El Nuevo Herald.
"La comunidad de belenistas siente mucho el fallecimiento de este prestigioso antiguo alumno de Belén", señaló en un comunicado el director de la Asociación de Antiguos Alumnos de Belén en Miami, Mariano Loret de Mola.
Rasco "fue un hombre de una personalidad poliédrica, se destacó en muchas actividades, y en todas puso valores éticos, entusiasmo y un sentido de humanismo cristiano", expresó la escritora Uva de Aragón, quien fue su alumna en la Universidad de Saint Thomas y colaboró con él en muchos proyectos culturales como el Instituto Jacques Maritain.
"Él solía decir que lo perfecto era enemigo de lo bueno, aunque era un hombre de pensamiento era más un hombre de acción; iba siempre a la esencia más que a lo adjetivo", apuntó De Aragón, citada por el diario miamense.
José Ignacio Rasco Jr., hijo del intelectual fallecido, recordó la actividad de su padre por un cambio hacia la democracia en Cuba.
"A pesar de haber sido un intelectual con habilidad para la palabra y la pluma era un hombre de acción, que fundaba partidos y organizaciones que abogaban a favor de la libertad", dijo, y añadió que en esa labor su padre conoció a numerosos presidentes y figuras políticas, "desde Robert Kennedy hasta Vaclav Havel y Lech Walesa". Estos últimos, en un momento en que Rasco trataba de incorporar las experiencias del intelectual disidente checo, más tarde presidente, y del presidente del Movimiento Solidaridad, respectivamente, para una posible transición en la Isla.
"A nivel cubano fue fundamental su amistad con Oswaldo Payá Sardiñas, quien lo tenía como una persona de confianza, con quien podía contar", expresó Rasco Jr.
"Mi padre vivió una vida ejemplar, y murió totalmente en paz", dijo.
A José Ignacio Rasco lo sobreviven, además de sus hijos María Rasco Lytle y José Ignacio Rasco Jr., su nuera Ana Rasco, cinco nietos y cinco bisnietos.